SAN PETERSBURGO/Rusia.- Rusia y China consideran que la cooperación mutua es un factor importante para garantizar la estabilidad a nivel mundial, declaró hoy el presidente ruso, Vladimir Putin, durante su discurso en la sesión plenaria del Foro Económico Internacional de San Petersburgo.
«La cooperación de Rusia y China en la arena internacional es sin duda alguna actualmente un factor importantísimo para garantizar la estabilidad a nivel mundial», afirmó.
El presidente ruso destacó que «actualmente Rusia no tiene unas relaciones tan profundas con ningún otro país como las que tiene con China. Somos realmente socios estratégicos en el pleno sentido de la palabra».
Según Putin, ambas partes muestran su interés en lograr igualdad de condiciones a la hora de solucionar cualquier problema, lo cual se observa, entre otras cosas, en el incremento del intercambio comercial entre ambos países.
«Nos pusimos un listón, alcanzar los 100.000 millones (de dólares de intercambio) durante el año pasado. Llegamos a los 108.000 millones. Superamos el listón, el intercambio comercial crece», afirmó.
Respecto a los retos comunes, Putin comparó las acciones promovidas por EEUU contra el gasoducto Nord Stream 2 y la compañía de telecomunicaciones china Huawei, al señalar que en ambos casos Washington defiende sus intereses en detrimento de los de otros.
En cuanto a la consecuente oposición de Estados Unidos a la construcción del gasoducto Nord Stream 2 el mandatario afirmó que este beneficiará tanto Rusia como a los demás países interesados en el proyecto.
Sin embargo, dijo, este proyecto «no se adecua a la lógica y no se corresponde con los intereses de quienes en el marco del modelo universalista existente se acostumbraron a la exclusividad y la impunidad, y a que por sus cuentas deben pagar otros».
«Y por ello intentan torpedear el proyecto», alegó.
Washington se opone abiertamente al Nord Stream 2, que suministrará gas ruso a Alemania por el fondo del mar Báltico, al afirmar que Europa estaría «totalmente controlada» por Rusia, mientras que Rusia insiste en el carácter puramente comercial del proyecto.
Putin comparó esta situación con la de «la compañía Huawei, a la que tratan no solo de acosar, sino expulsar sin ceremonias del mercado global», que ya es calificada en algunos círculos «como la primera guerra tecnológica de la era digital que está llegando».
Según el mandatario, la rápida transformación digital, las atractivas tecnologías y mercados parecería que están «destinados a ampliar los horizontes para todos los que estén abiertos a los cambios».
«Pero aquí también, lamentablemente, se erigen obstáculos: se implementan prohibiciones directas a la compra de activos de alta tecnología», subrayó.
La decisión de Washington de incluir a mediados de mayo a Huawei en una lista de compañías a las que se impide el acceso a la tecnología y al mercado estadounidenses ha levantado preocupaciones en todo el mundo sobre cómo va a afectar la medida a los productos de la multinacional china o al despliegue de esta tecnología.
Putin indicó que «todo monopolio significa siempre concentración de ganancia en manos de unos en detrimento de los restantes. Y en este sentido los intentos de monopolizar la nueva ola tecnológica, limitar el acceso a sus logros, llevan a un nuevo nivel sin precedentes la desigualdad global entre países y regiones».
«Y eso, como sabemos, es la principal fuente de inestabilidad», incidió.
Por su parte, el mandatario chino, Xi Jinping, presente en el evento en calidad de invitado de honor, defendió que en condiciones de inestabilidad económica los países deben buscar adaptar el modelo de globalización y no destruir el sistema comercial, en alusión directa a la guerra económica desatada contra su país por EEUU.
«En la actualidad los problemas de la globalización económica exigen una solución inmediata: aparecen fallas técnicas en la máquina de control de la globalización, pero hay que atenerse a estos principios y defender el multilateralismo en el sistema comercial mundial», incidió.
Según Xi, «hay que mejorar el sistema existente».
El presidente chino argumentó que «los principios básicos no siempre responden a los intereses de cada uno de los países», pero «si hablamos de beneficio para todos, entonces hay que atenerse a ese principio para garantizar la armonía a nivel global».
«En el mundo hay muchos países, grandes y pequeños, pero todos son iguales. Por ello, para solucionar las divergencias es necesario partir del principio de respeto mutuo», sentenció.
EFE