LONDRES (Reino Unido).– El exministro británico de Exteriores Boris Johnson insistió este miércoles en que el Reino Unido tiene que «salir de la Unión Europea (UE) el próximo 31 de octubre», al lanzar su candidatura para suceder a Theresa May al frente del gobierno del país.
En una abarrotada sala del barrio londinense de Westminster, Johnson dijo que «tres años» después del referéndum de junio del 2016 en el que los votantes apoyaron el «brexit» (salida del Reino Unido de la UE) y tras «dos fechas límites perdidas» -en marzo y abril- para ejecutarlo, el país no puede retrasar el nuevo plazo establecido.
El también exalcalde de Londres, partidario -si fuera necesario- de un «brexit» duro, aseguró que la población británica se siente «desilusionada» e incluso «desesperada» ante la incapacidad de los políticos para concretar la salida del país del bloque europeo.
Johnson puntualizó, no obstante, que la situación ideal no sería salir del club comunitario sin pacto alguno, pero adelantó que sería irresponsable no hacerlo si no se consigue un acuerdo.
En su opinión, los votantes se sentirían «aliviados» si finalmente se materializa el «brexit» porque esto permitiría centrarse en otras cosas importantes para el país.
Recalcó que los políticos han llegado a «un cruce de caminos» en el que «no son capaces de ir para adelante ni para atrás» y si esto «sigue así», alertó, entonces «hay un riesgo» de pérdida de confianza de la población en los políticos.
Para Johnson, un nuevo retraso en concretar la retirada del bloque europeo supondrá la entrada en el Gobierno del líder de la oposición laborista, el izquierdista Jeremy Corbyn.
En ese sentido, advirtió de que los votantes naturales del Partido Conservador apoyarán a otras formaciones políticas si no hay «brexit» para el 31 de octubre, en clara referencia al Partido del Brexit del antieuropeo y antiimigración Nigel Farage.
El exministro de Exteriores aspira a ser elegido nuevo líder del Partido Conservador el próximo mes de julio si consigue los suficientes apoyos entre los diputados «tories» y también entre los 160,000 afiliados del partido en el Reino Unido.
La todavía primera ministra, Theresa May, dimitió el pasado viernes después de tres frustrados intentos para que el Parlamento de Westminster (Londres) aprobase el acuerdo del «brexit» que había negociado con Bruselas durante casi dos años.
EFE