El Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos (FWS) no ha podido ponerse en contacto con el estadounidense acusado de matar al león Cecil de Zimbabue, Walter Palmer, para que prestara declaración, según ha informado este jueves el director de la agencia, Dan Ashe.
El FWS hizo público un comunicado el miércoles con su intención de abordar el caso y se mostró disponible para colaborar con el país africano en la resolución del incidente. «Estamos recopilando datos sobre el tema y vamos a ayudar a las autoridades de Zimbabue si nos lo piden. Nos corresponde a todos -no solo a los africanos- garantizar que las generaciones venideras de fauna salvaje continúen paseando por la Sabana de forma saludable», aseguró una portavoz de la agencia, Vanessa Kauffman.
Palmer había asegurado en un tuit desconocer que la caza de ese león era ilegal. «Lamento profundamente que la práctica de una actividad que amo y practico de forma responsable y legal haya resultado en la muerte de este león», insistió. Además, se ofreció a ayudar a las investigaciones.
Mientras, más de 100.000 firmas han pedido a la Casa Blanca que Palmer se enfrente a la justicia de Zimababue, y se espera una respuesta oficial de Washington.