La profesión de entrenador es la más inestable, detestable y salpicada de elogios, sin derecho a pedir estabilidad laboral y tener la certeza que un portazo en las narices es lo más cercano a una carta de felicitación.
Pablo Bengoechea no será el último que se quede sin trabajo por malos resultados, En la Liga 1 2020 ya han salido varios, Manuel Barreto, César Vigevani y Javier Arce encabezan.
Bengoechea hará coro en la orquesta de los desafinados que no respondieron a la música que mejor suena: la de los triunfos y buenos resultados.
Así el uruguayo deja Matute tras perder el clásico ante Universitario y encadenar resultados deplorables en la Liga 1 con 2 triunfos, un empate y 4 derrotas aparte del revés con Nacional en la Copa Libertadores.
Pablo Bengoechea ofreció un trabajo serio en Alianza Lima, pero en esta ocasión le jugaron sucio los propios dirigentes que le impusieron jugadores que no solicitó. Encima un indisciplinado Jean Deza fue un cuchillo para empeorar la relación con el resto del plantel.
La historia no contada tiene una certeza. En el camarín se dictan las normas de comportamiento y por más que Deza a los ojos de todo el mundo es un jugador difícil, siempre tendrá respaldo. ¿De quién? De los jugadores, sus compañeros que se unen para protegerlo.
Pablo Bengoechea no supo lidiar con un camarín salpicado de influencias diferentes, de líderes que no aceptan que se les toque.
El reflejo de todo salta a la vista. Los números son precarios y un alto déficit ofensivo de apenas 5 goles en siete partidos.
Aparte de ello Alianza Lima exhibió este año un juego alejado de lo que el equipo de Matute ofrece, un fútbol lindo, de toque, paredes y vistoso. Este Alianza Lima no tiene jerarquía. Se vio que el fútbol del pelotazo no va con el sentir del equipo victoriano.
Pablo Bengoechea no quiso cambiar, se negó a que volver a las raíces era el mejor consejo. Alianza Lima jugó a lo mismo, con un fútbol largo buscando la recepción de sus delanteros.
El resultado fue que Alianza Lima con un fútbol previsible se cayó y el resultado era tan evidente que el técnico charrúa tuvo que renunciar, dejar inconcluso su trabajo. Y pensar que luego de los malos resultados de Miguel Ángel Russo. Hoy campeón con Boca Juniors, el ‘profesor’ fue reclamado como el salvador.
Alianza Lima tiene un futuro incierto con partidos de Copa Libertadores pendientes y todo hace pensar que repetirá la actuación de 2017 donde el once victoriano sumó un punto. Se fue Bengoechea, pero en Matute hay más problemas que un libro del profesor cubano Aurelio Baldor.
Universitario gana 2-0 a Alianza Lima en clásico áspero y con poco fútbol (VÍDEO)
Foto: Prensa Alianza Lima