SAN JUAN.- Jefes de Estado y altos representantes gubernamentales de Latinoamérica y África asistirán mañana, miércoles, a la investidura del presidente de Surinam, Desi Bouterse, que en mayo pasado fue reelegido, confirmó hoy a Efe vía telefónica un portavoz de la Oficina del Presidente.
Según esta fuente, la ceremonia de investidura tendrá lugar en el Estadio Interno Nacional, ubicado en la capital, y al evento asistirán los presidentes de Ecuador, Rafael Correa, Guyana, David Granger, y Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang.
Además, estarán presentes el vicepresidente del Consejo de Estado de Cuba, Salvador Antonio Valdés Mesa, el vicepresidente de Venezuela, Jorge Arreaza, el vicepresidente de Nicaragua, Moisés Omar Halleslevens, el secretario general de la Comunidad del Caribe (Caricom), Irwin LaRocque, y el secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper.
El portavoz indicó que Colombia, Argentina, Uruguay y Brasil enviarán representantes de alto nivel a la investidura, mientras que el exprimer ministro de Haití Laurent Lamothe ha confirmado también su asistencia.
La Asamblea Nacional ha convocado una sesión extraordinaria que se celebrará en el estadio, con capacidad para 2.500 asistentes, para investir, primero, al vicepresidente Michael Ashwin Adhin y luego a Bouterse.
Se prevé que Bouterse nombre a los miembros de su gabinete durante la jornada y que los actos concluyan con un desfile de las Fuerzas Armadas.
Los jefes de Estado asistentes asistirán a un almuerzo con Bouterse y, probablemente, se celebren reuniones de bilaterales, dijo el portavoz sin dar más detalles.
El Partido Nacional Democrático (NDP) de Surinam, que encabeza el actual presidente Bouterse, resultó ganador el pasado mayo en las elecciones generales con más del 80% de los votos.
El NDP logró 26 de los 51 escaños de la Asamblea Nacional, mientras que la coalición opositora V7 obtuvo 17 escaños y el resto se los repartieron otros grupos de la oposición.
Bouterse, de 69 años, gobernó de facto de 1980 a 1987, cuando el país estaba bajo un régimen militar, y fue juzgado y condenado en rebeldía en Holanda por tráfico de cocaína, acusación que él niega.
En su país está pendiente de un juicio por el supuesto asesinato de 15 opositores durante la dictadura militar y su hijo está encarcelado en EEUU por tráfico de drogas y armas.
En 1980, cuando tenía el grado de sargento, Bouterse asumió el poder en Surinam tras un golpe de Estado que dio paso a dos años al frente del pequeño país suramericano de cerca de medio millón de habitantes.