BERLÍN.- La Confederación de Sindicatos Alemanes -DGB- advirtió hoy, en ocasión del Primero de Mayo, en contra de un recorte de los derechos laborales en medio de la destrucción de empleo causada por la pandemia de la COVID-19.
«Necesitamos un plan coyuntural que garantice los puestos de trabajo y evite que se rompa la cohesión social», afirmó el presidente de la DGB, Reiner Hoffmann, en un acto de su organización en formato virtual, ya que están prohibidas las concentraciones a causa del coronavirus.
«Es la primera vez en la historia de nuestra organización que no estamos en la calle», recordó al respecto Hoffmann. Alemania vivirá este año la peor recesión desde la II Guerra Mundial, añadió, respecto a los pronósticos del Gobierno, que prevén una contracción del producto interior bruto (PIB) este 2020 del 6,3 %.
El presidente de la DGB, organización con casi seis millones de afiliados, valoró positivamente las acciones emprendidas por la gran coalición de la canciller Angela Merkel para proteger a la empresa y, a la vez, evitar despidos masivos.
En ello juega un papel fundamental el llamado Kurzarbeit o fórmula de jornada reducida, en el que el Estado aporta hasta un 80 % del sueldo del trabajador a cambio de que no haya despidos. 751.000 empresas han solicitado ya este régimen para 10,1 millones de empleados, según cifras de la Agencia Federal de Empleo (BA).
Pese a ello se ha producido un repunte en las cifras del desempleo, cuya tasa se situó en abril en un 5,8 %, un 0,9 % de aumento interanual.
Hoffmann expresó su confianza en que las reservas de la BA -unos 26.000 millones de euros, gracias a las altas cifras de ocupación y el moderado desempleo que durante años caracterizó al mercado laboral alemán- serán suficientes para hacer frente a la situación.
La intervención de Hoffmann, parte de un programa virtual de tres horas ofrecido desde diversas plataformas en internet, fue el acto principal de un Primero de Mayo atípico y marcado por la pandemia.EFE
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