El presidente de EEUU, Donald Trump, se refugió en un búnker durante casi una hora el 29 de mayo por la noche cuando centenares de manifestantes estaban protestando frente a la Casa Blanca, confirmó a la cadena CNN un funcionario del gobierno y una fuente policial.
El periódico The New York Times fue el primero en informar del traslado del presidente al llamado Centro de operaciones de emergencia cuando los manifestantes estaban arrojando ladrillos y botellas delante de la Casa Blanca, y la policía respondía con gas pimienta. Un portavoz de la administración, Judd Deere, se negó a confirmarlo diciendo que «la Casa Blanca no hace comentarios sobre los protocolos y decisiones de seguridad».
Según la CNN, el presidente estuvo en el búnker poco menos de una hora. Una fuente familiarizada con el protocolo dijo que la primera dama de EEUU, Melania Trump, y su hijo, Barron, también habrían sido trasladados a la instalación. «Si la condición en la Casa Blanca se eleva a ROJO y el presidente es trasladado [al Centro de operaciones de emergencia], Melania Trump, Barron Trump y cualquier otro miembro de la primera familia también serían trasladados», explicó.
El domingo por la noche, la Casa Blanca advirtió a los empleados que deben ir a trabajar el lunes que mantengan ocultos sus pases hasta que lleguen a un punto de entrada del Servicio Secreto y después de que se vayan, según un correo electrónico que fue visto por la CNN.