La Habana, 17 jun (EFE).- Otros siete casos de coronavirus registrados el miércoles en Cuba elevaron el total hasta 2.280, informó el Ministerio de Salud Pública (Minsap), un día antes de que comience la desescalada en gran parte del país.
En esta jornada también se cumplió una semana sin nuevas muertes por la COVID-19 y el número de fallecidos se mantiene en 84, lo que supone una tasa de letalidad del 3,68 %.
Cuba iniciará el jueves su plan progresivo de reapertura en todo el país -que incluye, entre otras medidas, la reanudación del transporte público urbano y el turismo solo para locales- excepto en las regiones de La Habana y Matanzas, las únicas donde se siguen detectando casos.
De hecho, todos los nuevos infectados de hoy son residentes de La Habana, ciudad que concentra la gran mayoría de contagios en el país en las últimas semanas.
Seis de los siete pacientes del día no mostraban síntomas en el momento de la prueba. Cinco son contactos de otros casos confirmados, mientras en los dos restantes aún no se ha confirmado la fuente de la infección, especificó el director de Epidemiología del Minsap, Francisco Durán.
Los contagios de hoy se detectaron entre 2.320 muestras PCR completadas la víspera, lo que eleva a 141.151 las pruebas de este tipo realizadas en la isla, complementadas con test rápidos procedentes en su mayoría de China.
Cinco pacientes fueron dados de alta en el día, lo que eleva a 1.999 el número de personas recuperadas tras haber contraídola enfermedad.
En los hospitales cubanos permanecen ingresados 195 pacientes con el virus, de los que 190 evolucionan sin complicaciones, uno está crítico y cuatro graves.
Además, otras 389 personas se someten a vigilancia en centros sanitarios y 824 se encuentran en observación en sus hogares.
El Gobierno no ha detallado cuál es el calendario previsto ni los indicadores mínimos necesarios para que La Habana y Matanzas comiencen el proceso de desescalada.
De momento siguen vigentes estrictas medidas preventivas como el uso obligatorio de la mascarilla, la suspensión del transporte público, el cierre de fronteras salvo casos excepcionales y la clausura de escuelas y comercios no esenciales, entre otras.
Por otro lado, el doctor Francisco Durán urán anunció que Cuba está usando en algunos pacientes de COVID-19 el esteroide dexametasona, un fármaco común que puede reducir la mortalidad en casos críticos, según divulgó esta semana la Organización Mundial de la Salud (OMS) a partir de los resultados de un estudio de la británica Universidad de Oxford. EFE