ROMA.- Un Tribunal de la ciudad meridional italiana de Lecce condenó hoy a dos fiscales por desviar sus investigaciones sobre delitos tributarios de empresarios a cambio de regalos como joyas, diamantes o viajes.
La jueza Cinzia Vergine condenó al exfiscal de Trani (sur) Antonio Savasta a diez años de cárcel tras un proceso abreviado, como cabecilla de un sistema de corrupción que vinculó a magistrados y empresarios, según recogen los medios locales.
Por otro lado ha sido condenado a cuatro años de reclusión el que fuera su fiscal adjunto, Luigi Scimè, así como los abogados Ruggiero Sfrecola (4 años y 4 meses) y Giacomo Ragno (2 años y 8 meses) y el empresario inmobiliario Luigi Dagostino (4 años).
Los investigadores creen que Savasta coordinaba este sistema con el exjuez Michele Nardi, que está siendo juzgado con otros cuatro imputados en un proceso paralelo y de rito ordinario, no breve.
Todos ellos están acusados de numerosos delitos, entre estos el de asociación delincuente, corrupción, estafa, calumnia o cohecho, por desviar investigaciones y sentencias entre 2014 y 2018 a cambio de cuantiosas sumas de dinero o de joyas e incluso diamantes.
En el caso fue central el testimonio de un empresario que accedió a «comprar» a los magistrados para salir airoso de una investigación judicial y que finalmente reveló estos casos de corrupción, lo que llevó al arresto de los acusados en enero de 2019.
Los investigadores descubrieron así que los condenados prometían hacer la lista gorda o absoluciones a los empresarios a cambio de altas cantidades de dinero, de hasta 300.000 euros, pero también por viajes y regalos como joyas, diamantes u obras en sus domicilios. EFE