CARACAS.- Más de 800 activistas de 35 países firmaron una carta dirigida al Alto Representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, en la que condenaron el «injerencismo» que consideran que el Parlamento Europeo hace en Venezuela, informaron este lunes fuentes oficiales.
La Cancillería de Venezuela destacó en un comunicado que la carta fue firmada por más de 800 activistas de unos 100 movimientos sociales y partidos del mundo, quienes expresaron su «preocupación por la resolución que el Parlamento Europeo aprobó» el pasado viernes 10 sobre la situación humanitaria en el país suramericano.
«Lamentablemente, hay una mayoría de integrantes del Parlamento Europeo que insiste en una política de confrontación y en una política que se identifica con los objetivos del Departamento de Estado del Gobierno estadounidense para la promoción de la política de cambio de régimen en Venezuela», dicen los activistas en la misiva, según recoge la Cancillería venezolana que exaltó el documento.
Miguel Peña, miembro de la Coordinadora Latinoamericana en Bélgica y uno de los firmantes de la misiva, dijo que es muy importante que la UE respete la soberanía de Venezuela, «un país democrático, que tiene sus propios representantes escogidos por voto popular».
Sin embargo, se desconocen los nombres de todos los firmantes y movimientos que respaldan la carta, así como los países de los que proceden.
Las relaciones entre la UE y Venezuela se tensaron a finales de junio, cuando el presidente Nicolás Maduro decretó la expulsión de la jefa de la Delegación de la Unión Europea en Caracas, Isabel Brilhante Pedrosa, en respuesta a nuevas sanciones de los 28 contra funcionarios de su Gobierno.
La medida quedó «sin efecto» solo tres días después, tras una conversación telefónica entre Borrell y el canciller venezolano, Jorge Arreaza, y atendiendo a «la necesidad de mantener el marco de las relaciones diplomáticas».
Pero Venezuela resintió luego la resolución de la Eurocámara del pasado viernes en la que se insistía en la necesidad de elecciones libres y se rechazaron las vulneraciones del funcionamiento «democrático, constitucional y transparente» del Parlamento venezolano, así como los actos violentos contra sus miembros. EFE