Roberto Morales/ EFE
James Rodríguez pone punto final a su relación con el Real Madrid, con su primera etapa como época de mayor brillantez, condicionado por el gusto futbolístico de Zinedine Zidane, que nunca mostró confianza en el centrocampista colombiano, quien, tras su primera salida al Bayern Múnich, dice adiós a España para iniciar nueva aventura en el fútbol inglés.
«El Real Madrid quiere mostrarle su agradecimiento y cariño por todo este tiempo que ha formado parte de nuestro club y le desea mucha suerte en esta nueva etapa de su trayectoria profesional», reza el comunicado con el que el club madridista despidió a James.
Su continuidad en el Real Madrid ya era imposible una temporada más. El jugador deseaba jugar y con Zidane las puertas estaban cerradas para él.
Perdió la paciencia el colombiano cuando pidió no viajar a San Mamés para el partido contra el Athletic en el que el equipo blanco se jugaba la pasada Liga tras el confinamiento. Fue cuando James desconectó definitivamente. Cansado de dar todo lo que tenía en entrenamientos, mostrar profesionalidad y no recibir una recompensa.
Llegó al Real Madrid como una gran estrella, tras ser referente en un Mundial de Colombia, y se marcha sin ser valorado. Un total de 125 partidos en seis temporadas, 37 goles y una zurda privilegiada en cada acción a balón parado.
No se debió quedar en el Real Madrid tras dos años en el Bayern, pero el interés del Atlético de Madrid no fue acompañado con una propuesta de traspaso. La opción de cesión no era viable. Sabía que para Zidane sería un jugador de segunda línea y, pese a que al inicio jugó, fue uno de los futbolistas que quedó marcado en la derrota de Mallorca que significó un punto de inflexión. Apenas 14 partidos, nueve como titular y un solo gol. Su luz se apagó.
«Es frustrante no jugar. Sé que tengo las condiciones para hacerlo siempre, pero por otras personas no puedo», dijo en sus últimas declaraciones lanzando un dardo directo a Zidane.
Acude a los brazos de otro técnico que le conoce a la perfección, el italiano Carlo Ancelotti, con quien triunfó en su primera etapa en el Real Madrid y que ya le reclamó para el Bayern Múnich. Con el deseo de ser un jugador importante en el Everton.
El Real Madrid, que pagó en su día 80 millones de euros por el colombiano, recupera 25 con la venta y James probará una nueva aventura en un estilo de fútbol, el inglés, que va a la perfección a sus características.
Habrá jugado en todas las grandes Ligas de Europa tras comenzar a brillar en el panorama internacional en Portugal con el Oporto, crecer en Francia en las filas del Mónaco antes de llegar al Real Madrid y ganar títulos en Alemania con el Bayern.
Recupera la alegría ante un nuevo reto de su carrera enterrando un tiempo de pesadilla.
Fuente: Agencia EFE