FRANCFORT/Alemania.- La compañía biofarmacéutica CureVac, que investiga el desarrollo de una vacuna contra el COVID-19 desde enero, ha comenzado las pruebas clínicas en Perú y Panamá.
CureVac ha informado de que ha vacunado a los primeros voluntarios en la fase 2 del ensayo clínico de su vacuna CVnCoV, que se basa en el ARN mensajero o ARNm.
La biofarmacéutica alemana realizará las pruebas a 690 voluntarios sanos divididos en dos grupos, adultos mayores de 61 años y adultos entre 18 y 60 años.
Los participantes serán vacunados dos veces con una espacio temporal de 28 días.
CureVac también investiga diferentes dosis, empezando por 6 microgramos, y la respuesta inmunológica de los participantes tras ser vacunados con CVnCoV en una zona con alta incidencia de infecciones de COVID-19.
La empresa alemana prevé tener los datos de la segunda fase del ensayo clínico de los adultos más mayores en el cuarto trimestre.
Una vez obtenidos los datos de las actuales fases 1 y 2 de su ensayo clínico, CureVac prevé comenzar con la tercera fase del ensayo con hasta 30.000 voluntarios en el cuarto trimestre.
CureVAc va a recibir ayudas del Estado alemán por valor de 252 millones de euros y obtuvo en agosto casi 200 millones de euros con su salida a la bolsa en Nueva York.
Su vacuna se basa en el ARN mensajero, que es el ácido ribonucleico que transfiere el código genético procedente del ADN del núcleo celular a un ribosoma en el citoplasma, la parte de la célula que se encuentra entre el núcleo y la membrana plasmática.
En el citoplasma se descifra la información para que el cuerpo humano produzca la proteína del virus, que desencadena la reacción inmunológica para protegerse de él.
Al recibir la vacuna el cuerpo humano debe producir esas proteínas del virus.
Esta vacuna, basada en genes, transporta las instrucciones genéticas para que las células del cuerpo fabriquen el antígeno, suministrando el material genético que instruye sobre cómo fabricarla. EFE