LA HABANA.- Las pérdidas anuales estimadas que el embargo de Estados Unidos causa a Cuba superaron por primera vez los 5.000 millones de dólares entre 2019 y 2020, según el informe que el Gobierno del país caribeño elabora cada año para su presentación ante Naciones Unidas.
El perjuicio económico del bloqueo financiero y comercial vigente desde 1962 se cifró en ese periodo en 5.570 millones de dólares, «calculado de forma conservadora», anunció este jueves el ministro cubano de Exteriores, Bruno Rodríguez (foto).
«Los daños acumulados durante casi seis décadas alcanzan a precios corrientes la cifra descomunal de 144.413 millones de dólares, lo que para una economía pequeña como la de Cuba es una carga verdaderamente abrumadora», consideró el canciller.
Si el cálculo se realiza tomando en cuenta la depreciación del dólar frente al precio del oro en el mercado internacional, la suma de las pérdidas desde que fue impuesto el embargo rebasa el billón de dólares, lo que supone un crecimiento del 19 % respecto al año anterior, de acuerdo al informe.
El jefe de la diplomacia cubana recriminó al Gobierno de Estados Unidos haber recrudecido el embargo con nuevas sanciones «aprovechando la pandemia» y calificó esta política de «acto de genocidio y guerra económica».
«La crueldad de su aplicación en medio de una pandemia es inédita», afirmó el canciller, quien advirtió de que «gane quien gane» en las elecciones estadounidenses de noviembre «tendrá que afrontar la realidad tangible de que el bloqueo daña al pueblo cubano y viola los derechos humanos».
Entre las trabas añadidas que mencionó el ministro cubano figuran las «dificultades descomunales» o imposibilidad, en algunos casos, de adquirir fármacos, equipos médicos o material de protección para responder a la pandemia de COVID-19.
Este documento, que ya ha sido remitido a la Secretaría General de la ONU, es la base del proyecto de resolución que desde 1992 Cuba presenta cada año ante la Asamblea General de ese organismo para pedir el fin del «bloqueo» económico, comercial y financiero.
La iniciativa suele concitar un respaldo mayoritario, con las excepciones habituales de EE.UU. e Israel.
La presentación del informe de este año se desplazó a mayo de 2021 debido a las restricciones provocadas por la crisis sanitaria tanto en Nueva York, sede del cuartel general de la ONU, como en el resto del mundo. EFE