GUATEMALA.- El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, dijo hoy que va a «dar la cara» ante la solicitud de antejuicio presentada en su contra por la Comisión Internacional Contra la Impunidad (CICIG) y la Fiscalía, por su supuesta vinculación con un caso de corrupción aduanera.
«Tenemos que enfrentar la situación, vamos a dar la cara y luego nos vamos a pronunciar», afirmó este viernes el mandatario en declaraciones a los periodistas tras el pedido de la CICIG y la Fiscalía de un antejuicio, necesario para quitar la inmunidad al jefe del Estado y que pueda ser investigado.
La CICIG, un organismo de la ONU, y el Ministerio Público (Fiscalía) pidieron el antejuicio con base en una investigación iniciada en mayo del 2014, que lleva «a considerar como probable» que Pérez Molina «haya participado en la comisión de las mismas conductas punibles por las que han sido acusadas las personas que integraban la organización criminal denominada ‘La Línea'».
Así lo explicó este viernes la fiscal general de Guatemala, Thelma Aldana, en una rueda de prensa conjunta con el titular de la CICIG, Iván Velásquez.
Pérez Molina ya se libró de un proceso de antejuicio la semana pasada, cuando el Congreso rechazó levantarle la inmunidad e impidió así que fuera investigado tanto por el caso «La Línea», como otra corruptela en el Seguro Social.
Por el fraude aduanero fue detenida hoy la exvicepresidenta guatemalteca Roxana Baldetti, quien se vio obligada en mayo pasado a renunciar al cargo por ese caso.
«Lo lamento mucho (…) tendrá que responder a los tribunales», dijo el presidente tras la detención de Baldetti, al responder a periodistas durante una gira de trabajo por el departamento oriental de Zacapa, donde supervisó la entrega de alimentos a familias afectadas por la sequía.
Pérez Molina comentó que Baldetti se había puesto a disposición de la Justicia luego de renunciar al cargo el pasado 8 de mayo.
La exvicepresidenta fue detenida en un centro asistencia privado por orden del juez de Mayor Riesgo B, Miguel Ángel Gálvez.
La CICIG y la Fiscalía acusan a la exvicepresidenta de «asociación ilícita, cohecho pasivo y casos especiales de defraudación aduanera».
Por el caso «La Línea» hay hasta ahora 27 detenidos, mientras que Juan Carlos Monzón, exsecretario privado de Baldetti y señalado de ser un líder de la estructura, está prófugo desde el pasado 16 de abril.