Faltan escasos días para la Navidad 2020 en medio de un ambiente limeño distinto y lejano al furor de años atrás en que el envolvente espíritu navideño hacía que las sonrisas contagiosas de niños adultos marcaba el advenimiento del nacimiento del Niño Jesús.
El centro de Lima dejó de ser el hervidero de gente que procuraba comprar regalos y presentes con tiendas con arreglos navideños y atractivas jovencitas con ofertas del día.
Esta vez la Plaza de Armas no tiene el furor de otros años con decir que permanece cerrada al público con un árbol gigante, solitario, que refleja todo lo diferente de un año marcado por la Covid 19.Los avisos de distanciamiento social y campañas de sanidad cumplen su efecto multiplicador para que el contagio no forme parte de las celebraciones aunque en Mesa Redonda la aglomeración de gente provoca y desafía al virus.
En fin, esta será una Navidad distinta, con precauciones y abrazos a distancia con ayuda de la tecnología que acerca a las personas a despecho de un abrazo presencial.
Navid en medio de la pandemia con alarmas de una posible segunda ola que ha provocado que las personas estén muy lejos de repetir aquella tonada de ‘ven a mi casa esta Navidad’.
Crónica Viva: Texto y fotos: Hugo Laredo