CHIMBOTE.- Los restos mortales de monseñor Luis Bambarén Gastelumendi pasaron su primera noche en la cripta de la catedral chimbotana Nuestra Señora del Carmen y San Pedro Apóstol. En este lugar descansarán para siempre, luego de que el covid-19 arrebatara la vida del obispo emérito de Chimbote.
Bambarén sirvió a la iglesia católica durante 27 años en Chimbote. De allí que siempre estuvo ligado a esta ciudad ancashina y su última voluntad fue ser sepultado en dicha jurisdicción.
El féretro conteniendo los restos mortales del obispo emérito de Chimbote fue trasladado, en la víspera, vía área desde Lima hasta el aeropuerto de Chimbote, y luego en medio de estrictas medidas de seguridad y un gran despliegue policial llevados hasta la catedral.
Monseñor Bambarén defensor de la libertad de expresión y socio honorario de la ANP
El obispo de la Diócesis de Chimbote, monseñor Ángel Simón Piorno, dirigió una misa que, por la emergencia sanitaria, se realizó con un aforo limitado, pero fue seguida en tiempo real a través de la cuenta de Facebook de la Diócesis de Chimbote.
Durante la liturgia, Simón Piorno recordó el servicio pastoral de Luis Bambarén. Lo calificó como un hombre de fe y valía, pero además muy cercano a las necesidades de los que menos tienen.
Autoridades y fieles también estuvieron presentes para darle el último adiós al religioso.
ANDINA- Foto internet-medios