El cabecilla terrorista Abimael Guzmán fue capturado la noche del sábado 12 de septiembre de 1992 (Hace 29 años) por un grupo de agentes del Grupo Especial de Inteligencia (GEIN), de la Policía Nacional. Se trató de la Operación Victoria.
Los agentes Ana Cecilia Garzón (Gaviota) y Julio Becerra (Ardilla) ingresaron por la tarde de ese día de finales del invierno limeño a la bodega ubicada al costado de la casa de la calle Varsovia 459 (antes Calle 1), de la urbanización Los Sauces, Surquillo, muy cerca de la avenida Aviación.
En esa casa de dos pisos vivían los senderistas Carlos Incháustegui y Maritza Garrido Lecca, quienes habían recibido esa día visitas.
Lejos de la zona, en el distrito de La Victoria, ese 12 de septiembre por la tarde se había disputado el clásico del fútbol peruano entre Alianza Lima y Universitario de Deportes.
Alberto Fujimori, quien había disuelto el Congreso el 5 de abril de ese año, pescaba, en tanto, fuera de Lima, en el río Amazonas.
El año 1992 había sido significativamente duro y dramático para el Perú. El país superaba, en medio de la crisis económica, una epidemia de cólera y un fuerte fenómeno de El Niño. Tras el estío, Lima soportó atentados terroristas con gran número de víctimas mortales. Uno de los más demenciales ocurrió el 16 de julio en la calle Tarata de Miraflores que dejó 25 muertos y decenas de heridos.
Antes, en junio Sendero Luminoso había destruido la televisora Frecuencia 2 en Jesús María con tres trabajadores del canal muertos.
Ese 12 de septiembre dos agentes varones estaban comisionados en esa zona de Surquillo. Para no resultar sospechoso la presencia de estos agentes Gaviota y Ardilla optan por relevarlos.
Sus órdenes eran impedir que la puerta que da a la calle se cerrara cuando la visita saliera de la casa. Debían entrar y registrar qué se ocultaba allí y para ello había que esperar el momento.
Gaviota portaba en la cartera una radio, con la cual de forma discreta entablaba comunicación con los otros agentes que realizaban vigilancia en los alrededores de la casa objetivo.
Era 1992 y el celular y la internet aún estaban lejos de llegar al país.
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En medio de la noche invernal Gaviota y Ardilla seguían en alerta. A las 20 horas se observó movimiento dentro de la vivienda y unos minutos después la puerta de la casa por fin se abría.
Maritza Garrido Lecca, Carlos Incháustegui se dejaban ver y con ellos también Celso Garrido Lecca, tío de la bailarina, y Patricia Awapara, ambos invitados.
Gaviota y Ardilla desenfundaron entonces sus armas en medio del silencio de la calle con la advertencia que eran policías y no se debían mover. Maritza grita que eran asaltados.
Incháustegui intentó despojar a Ardilla del arma. Gaviota reaccionó y disparó al aire. El tiro confundió a los intervenidos y alertó a entrar a los otros agentes.
A las 20.45 horas los intervenidos ya estaban en el suelo, y Ardilla irrumpía en la vivienda. En el primer descanso de la escalera se percató de que una mujer se escondía. La siguió y vio que entraba a una habitación. Al Ingresar descubrió a Abimael Guzmán sentado detrás de un escritorio.
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“Si te mueves, te mato”, le advirtió. El cabecilla senderista se resignaba a su detención. “Tenemos al cachetón, tenemos al cachetón”, se escuchó a los agentes vía radio.
A las 21.00 horas los agentes del GEIN, dirigidos por el coronel (r) Benedicto Jiménez y el general Marco Miyashiro, comprobaban que la documentación hallada permite conocer aún más la estructura de los terroristas de Sendero Luminoso.
Las redacciones de los diarios entraron en alerta esa noche. Se cambiaron las portadas. Ha sido detenido el cabecilla terrorista Abimael Guzmán, responsable del inicio de una guerra que ya ha dejado miles de muertos y devastado el país desde 1980.
Foto Andina