WASHINGTON.- El Departamento de Estado de EE.UU. aplaudió este lunes la restauración de las comunicaciones directas entre las dos Coreas y mantiene su esperanza de que Pionyang responda «positivamente» a su propuesta de discusiones directas con Washington.
Así lo indicó el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, en una rueda de prensa al ser preguntado por el restablecimiento de las líneas de comunicación directa por parte de Corea del Norte con Corea del Sur.
«Como hemos dicho previamente, nosotros respaldamos el diálogo entre las dos Coreas», señaló Price.
El funcionario estadounidense reaccionaba así a la confirmación del Gobierno surcoreano de que el Norte había contestado a su llamada y que las comunicaciones militares quedaban reactivadas, unos dos meses después de que Pionyang cortara las comunicaciones a mediados de agosto en protesta por unos ejercicios militares conjuntos de Seúl y Washington.
Price insistió en que EE.UU. busca un «enfoque práctico y calibrado» con Corea del Norte que permita lograr «progresos tangibles» hacia una «completa desnuclearización» de la península coreana.
Para ello, recordó que EE.UU. «sigue preparado» para reunirse con funcionarios norcoreanos «sin condiciones previas».
«En nuestros mensajes hemos realizado propuestas específicas de discusiones y esperamos que Corea del Norte responda positivamente», afirmó.
Corea del Norte dinamitó la oficina que ambos Gobiernos tenían en el territorio fronterizo de Kaesong y cortó todas sus comunicaciones con el Sur en junio de 2020, en protesta por el envío desde el país vecino de folletos críticos con el régimen.
Las líneas volvieron a funcionar a finales del pasado julio, tras más de un año, pero Pionyang dejó de contestar a las llamadas de Seúl nuevamente en agosto por las maniobras conjuntas de Corea del Sur y EE.UU., que el Norte considera un simulacro de invasión de su territorio y una amenazada para su soberanía.
El Gobierno surcoreano ve el restablecimiento de la comunicación como un signo positivo y espera que contribuya a retomar las conversaciones bilaterales para resolver asuntos pendientes como la adopción de un tratado de paz que nunca llegó a firmarse tras la guerra civil en la península de 1950 a 1953 o la desnuclearización. EFE