NACIONES UNIDAS.- El representante permanente de Cuba ante las Naciones Unidas, Pedro Luis Pedroso, destacó hoy en el Consejo de Seguridad de la ONU que el mundo necesita de un nuevo orden internacional más justo para enfrentar las desigualdades.
Durante su intervención en el debate abierto sobre “Mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales: exclusión, desigualdad y conflictos”, el embajador cubano también abogó por una reforma de ese organismo de 15 miembros.
Actualmente urge una mayor representación de los países del Sur, democracia, transparencia e inclusividad en las labores del Consejo, y el cese de su intromisión en el mandato y funciones de la Asamblea General y otros órganos, para preservar la eficacia y la credibilidad de Naciones Unidas, recalcó.
La prevalencia de un orden internacional profundamente injusto y antidemocrático, décadas de neoliberalismo despiadado, la existencia del capitalismo excluyente y sus irracionales patrones de producción y consumo, han antepuesto el egoísmo de una minoría a las legítimas aspiraciones de una mayoría, expresó el diplomático.
Ahora, observó, la pandemia de Covid-19 vino a agudizar la crisis global, dejando desprotegidos a los más vulnerables, al tiempo que los más ricos siguen aumentado sus beneficios.
En medio de este contexto, la paz y la seguridad internacionales se encuentran constantemente amenazadas por conflictos, actos de agresión, guerras no convencionales, tentativas de cambios de régimen y frecuentes violaciones de la Carta de la ONU y el Derecho Internacional, denunció.
Asimismo, llamó al cese de la aplicación de medidas coercitivas unilaterales, las cuales impiden el enfrentamiento efectivo a la pandemia y la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Por el contrario, resaltó, se impone el fortalecimiento del multilateralismo, el respeto irrestricto a la Carta de la ONU y al Derecho Internacional y el cumplimiento de los compromisos y obligaciones contraídas.
Además, se refirió al lamentable e inaceptable hecho de la profunda desigualdad global en el acceso y distribución de las vacunas contra la Covid-19, que agrava la brecha Norte-Sur.
Según indicó, de los siete mil millones de dosis de vacunas administradas, más del 80 por ciento se destinaron a países del Grupo de los 20, cuyas poblaciones representan mucho menos de la mitad de los habitantes del planeta.
Mientras tanto, las naciones de bajos ingresos, la mayoría de ellas en África, solo han recibido el 0,4 por ciento de las vacunas, detalló el embajador cubano.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, encabezó este martes el debate abierto del Consejo de Seguridad sobre exclusión, desigualdad y conflictos armados.
Ante ese organismo, el mandatario mexicano denunció que el principal obstáculo para el bienestar, el desarrollo y la paz es la corrupción en todas sus expresiones.
Igualmente, criticó el modelo neoliberal, que alienta la explotación desmedida de recursos naturales y exacerba las desigualdades.
López Obrador propone acabar con la pobreza
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se sumó hoy al debate sobre la fiscalidad a las grandes fortunas mundiales y propuso un plan que consiste en tasar con un 4% las grandes riquezas como receta para acabar con la pobreza.
En su esperado discurso ante el Consejo de Seguridad de la ONU en Nueva York, el presidente señaló cómo estaría compuesto este «fondo» que llamó Plan Mundial por la Fraternidad y el Bienestar»: un 4% «voluntario» que pagarían las mil personas más ricas del mundo, otro porcentaje similar pagarían las mil empresas más grandes y los países del G-20 destinarían finalmente un 0.2% de su PIB al fondo.
Con ello se recaudarían «un billón de dólares», que serviría para sacar de la pobreza a los 750 millones de personas que sobreviven con menos de 2 dólares al día, según explicó en este discurso que dio aprovechando que su país preside este mes el Consejo de Seguridad.
Aunque los detalles se desvelarán en los próximos días en la ONU, López Obrador dijo que para ser beneficiario de este fondo se requerirá «una tarjeta o monedero electrónico» que puede ser creado por el Banco Mundial o el Fondo Monetario Internacional.
Fouente: PL-Foto ICRT