El Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin) informó en un comunicado publicado el 26 de enero que durante la mañana del 25 de enero «se registró el vertimiento de un volumen de crudo estimado en 8 barriles».
La autoridad señaló en su comunicado que esto ocurrió como parte del retiro de remanentes de crudo del ducto, en el marco de la fiscalización del daño ambiental producido por el derrame de 6 mil barriles el pasado 15 de enero.
Si bien el organismo señala que este segundo derrame de petróleo «fue controlado por las barreras de contención, y elementos absorbentes que se encontraban dispuestos en la zona», eso no exime a que la empresa del Grupo Repsol sea sometida a una segunda investigación para determinar si este nuevo derrame pudo ser evitado.
El procurador público del Ministerio del Ambiente, Julio César Guzmán, afirmó: «Todavía la Procuraduría no ha tomado conocimiento formal de la comunicación de la empresa [Repsol] con respecto a este último incidente. Sin embargo, la DICAPI ya dio cuenta de esta situación. Al parecer (todavía es una investigación), producto de la limpieza del ducto se ha escapada una cantidad significativa de petróleo nuevamente que vuelve a afectar estas zonas que estaban siendo controladas, a partir de la semana pasada».
Por ello, el procurador Guzmán señaló: «Creemos que es un nuevo hecho contaminante y producto de eso también vamos a incorporar esta situación en la misma carpeta de investigación criminal que se tiene».
DESCARTAMOS UN SEGUNDO DERRAME de hidrocarburos. Advertimos a la población sobre la circulación de información falsa e invitamos a conocer el avance diario en las labores de recuperación ingresando aquí https://t.co/QjMPlwyUqM pic.twitter.com/AUtFmBBiRG
— Repsol Perú (@repsol_peru) January 26, 2022
Por su parte, horas antes de que cualquier entidad alerte sobre este segundo derrame de petróleo, Repsol negó los hechos en sus redes sociales.
Sin embargo, aproximadamente dos horas después del comunicado publicado por Osinergmin, la empresa española emitió un comunicado titulado: «Repsol descarta nuevo derrame de petróleo». En el documento, la petrolera afirma que lo que se generó el 25 de enero reportado por la DICAPI fue un «afloramiento controlado de remanentes».
Aunque el comunicado cita un informe del mismo ente regulador, en el que la autoridad señala que el nuevo derrame de petróleo «era previsible y razonable de que esto pudiera ocurrir», lo cierto es que hubo un nuevo derrame de al menos 8 barriles de petróleo a 18 metros bajo el mar.