MELBOURNE.- Este sábado pintaba muy bien para el tenis en Melbourne. Y el día no pudo ser mejor, porque Ashleigh Barty puso fin a la maldición local que se había extendido en los cuadros individuales del Open de Australia durante 44 años.
Antes que ella lo habían logrado Margaret Court, Evonne Goolagong, Kerry Melville Reid y Chris O’Neill. Esta última, vencedora en la edición de 1978, estaba en primera línea de la grada.
Barty, verdugo de Daniell Collins por 6-3 y 7-6(2), dio un paso más que su compatriota Wendy Turnbull, la última local en plantarse en la lucha por el título en 1980. En su caso no pudo doblegar la resistencia de Hana Mandlikova.
Collins fue la cuarta víctima consecutiva de Ash de nacionalidad estadounidense. La victoria le permite ser la única en activo, junto a Serena Williams, capaz de ganar un Grand Slam en tres superficies distintas.
En 2019 se impuso en la tierra de Roland Garros y el año pasado lo hizo en el césped de Wimbledon. La fiesta de Australia hizo que el palco de la Rod Laver Arena estuviera repleto de rostros conocidos y relevantes del país.
Desde el nadador Ian Thorpe y la atleta Cathy Freeman, pasando por el actor Russell Crowe, hasta Laver, la leyenda que da nombre a la pista central del Melbourne Park.
La final tuvo como punto de inflexión el quinto juego del primer set. Collins pasó de tener bola de rotura a encajar el ‘break’ con una doble falta inmediatamente después.
En la segunda manga, la norteamericana volvió a la carga con un favorable 2-0. Era la segunda vez que Barty perdía su servicio. La otra fue en los octavos con la yanqui Amanda Anisimova.
La potencia de los tiros de Danielle hacía daño y disparó el marcador hasta el 3-0. Collins jugaba una final paralela con la grada, claramente en su contra. Ganaba momentáneamente la partida con un 5-1 a su favor y celebraba cada punto como si fuera el último de su vida.
Barty reaccionaría con cuatro juegos del tirón y subiendo en 10 kilómetros por hora la velocidad de su golpe de derecha. El desenlace llegaría al ‘tie break’ donde la mejor jugadora del planeta impuso su mayor experiencia.
Con agencias de noticias