El Directorio Ejecutivo del Banco Mundial aprobó hoy un préstamo por US$100 millones para fortalecer el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación en el Perú (SINACTI). El proyecto impulsará la investigación, el desarrollo, y la innovación (I+D+i), en tres áreas estratégicas para el país: el cambio climático, la salud y la economía digital.
A fin de lograr este objetivo, el ente internacional reforzará tres aspectos clave para el éxito del SINACTI: la gobernanza y las reformas institucionales; los recursos humanos y la generación de conocimiento; y la transferencia de tecnologías y conocimientos entre universidades, entidades públicas de investigación, y el sector privado.
Falta de industria tecnológica
Entre 2000 y 2019, Perú sostuvo un crecimiento económico notable en la región, respaldado en sólidas políticas macroeconómicas y un entorno externo favorable. La diversificación económica del país ha incrementado en los últimos años, pero su economía aún se caracteriza por una baja productividad del sector privado y sigue dependiendo en gran medida de la exportación de materias primas.
La limitada productividad se explica en parte por una baja adopción de tecnología e innovación en las industrias. Además, la falta de disponibilidad de mano de obra altamente calificada afecta la competitividad y la productividad. Finalmente, en las áreas donde el Perú produce conocimiento de calidad mundial (como en salud), este no siempre se traduce en innovación en el sector, y no contribuye lo suficiente a resolver los desafíos que enfrenta nuestro país.
“Una de las brechas más importantes para el buen desempeño de la ciencia, tecnología y la innovación (CTI) en el Perú está en la escasez de recursos humanos de muy alto nivel en estas áreas. A este fin se orienta fuertemente el proyecto, poniendo énfasis en las áreas relacionadas con la competitividad económica, social y ambiental, campos que son decisivos para el desarrollo integral del país”, señala Benjamín Marticorena, presidente del Concejo Nacional de Ciencia Tecnología e Innovación Tecnológica (Concytec).
“Asimismo, la formación de redes de investigación y de innovación con la participación de especialistas de las distintas regiones del país y con sus pares de otros países es fuertemente apoyada por el proyecto para que la eficacia del trabajo colaborativo se exprese en todo su potencial. A su vez, el fortalecimiento de la institucionalidad del SINACTI facilitará el relacionamiento en redes”, explica.
Tres objetivos principales
El proyecto consta de tres componentes. El primero apunta a fortalecer las instituciones y la gobernanza del SINACTI para impulsar la innovación en Perú. Para ello, buscará mejorar las capacidades del Concytec y Prociencia, así como el resto de las instituciones que conforman el SINACTI.
El segundo componente financiará investigaciones y estudios de doctorado, y busca desarrollar capacidades humanas para generar conocimiento con el objetivo de mejorar la calidad, cantidad y relevancia económica, social y ambiental de las investigaciones. Este componente promoverá especialmente la participación de las mujeres para contribuir a cerrar las disparidades de género en el ámbito de la investigación.
Finalmente, el tercer componente está dirigido a fortalecer los vínculos entre el sector privado y la Academia para acelerar la transferencia de tecnología y generar innovaciones empresariales basadas en ciencia y tecnología.
“La investigación y la innovación son propulsores fundamentales para la competitividad, la productividad y la diversificación económica de los países, pero también contribuyen de manera decisiva a la búsqueda de soluciones para los principales retos del desarrollo”, explica Marianne Fay, directora del Banco Mundial para Bolivia, Chile, Ecuador y Perú.
“Con este proyecto, esperamos contribuir a consolidar un Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación para el Perú que impulse el desarrollo económico inclusivo y a la vez contribuya con evidencia a enfrentar los desafíos sociales y ambientales del país, tales como garantizar el acceso a servicios de salud de calidad, reducir disparidades regionales y adaptarse al cambio climático y mitigarlo”, concluyó.
Se trata del primero de una serie de tres proyectos sucesivos por un monto total de US$300 millones, que tienen como objetivo mejorar la contribución del SINACTI a la productividad y la diversificación de la economía, con un enfoque especial en el crecimiento verde y el desarrollo regional.
Fuente: Andina