MADRID.- El primer ministro de China, Li Keqiang, ha mantenido este viernes una conversación telefónica con el primer ministro de Sri Lanka, Mahinda Rajapaksa, en la que Pekín ha ofrecido al país su ayuda para enfrentar la grave crisis económica que atraviesa el país.
Según ha recogido la agencia de noticias Xinhua, China estaría dispuesta a desempeñar un papel constructivo en el desarrollo socioeconómico de Sri Lanka basado en el «principio de no injerencia en sus asuntos internos».
El primer ministro chino también ha prometido al país que Pekín impulsará la cooperación con Sri Lanka en materia económica, comercial y turística, lo que incluye, además, la negociación y firma de su acuerdo de libre comercio, tal y como ha recogido la cadena de televisión china CGTN.
La moción de censura preparada por la oposición contra el Gobierno de Sri Lanka ha sido aplazada provisionalmente a la espera de los resultados de la crucial reunión mantenida esta semana entre las autoridades del país y el Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre un préstamo extraordinario para salvar al país de la peor crisis económica y política de su historia reciente.
El aplazamiento ha tenido lugar este viernes a petición del ex primer ministro del país Ranil Wickremesinghe, a la espera de que el ministro de Finanzas, Ali Sabry, presente sus conclusiones sobre el encuentro que se ha celebrado en Washington esta semana.
La pandemia y la crisis energética derivada de la guerra en Ucrania han terminado por explotar en un país de por sí bajo una gran presión social entre acusaciones de corrupción y nepotismo contra el Gobierno del presidente, Gotabaya Rajapaksa.
Los precios del pan y del combustible se han disparado y cientos de personas han sido detenidas en las últimas semanas dentro de las manifestaciones contra el mandatario, que llegó a declarar el estado de emergencia y cambió a la práctica totalidad del Consejo de Ministros –salvo a su hermano y jefe del Gobierno, Mahinda– para apaciguar los ánimos.
El ministro Sabry ha expresado en los últimos días su esperanza de que Sri Lanka pueda salir adelante con la ayuda de China, India, el FMI, el Banco Mundial y el Banco Asiático de Desarrollo (ADB), pero ha anticipado que la crisis económica tardará bastante tiempo en terminar.
La tensión ha subido un punto más esta semana tras la muerte de un manifestante por disparos de la Policía. En este sentido, el mandatario ha puesto en alerta a las fuerzas de seguridad ante una posible repetición de los enfrentamientos tras el funeral del fallecido, celebrado este viernes.
Fuente: europapress.es