Freddy Ternero lideró una grupo de talentosos jugadores en el Cienciano que logró la Copa Sudamericana en el 2003 y la Recopa Sudamericana en el 2004, los dos únicos títulos internacionales peruanos a nivel de clubes.
Durante todo el torneo, la fortaleza del elenco cusqueño fue de menos a más, y partido a partido el liderazgo del ahora recordado director técnico fue fundamental para que se allanara el camino hacia la conquista del título.
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Este período se caracterizó por el ímpetu de la hinchada cusqueña, que selló su marca con el “Sí se puede”, arenga que luego fue adoptada para alentar también a la selección peruana.
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Cienciano venció en cuartos de final al Santos de Brasil, en semifinales al Atlético Nacional de Ecuador; y en la final al River Plate de Argentina. La hinchada incondicional siempre estuvo al lado, alentando al ‘Papá cusqueño’.
Cienciano conformó un equipo con jugadores cuya estrella futbolística tintineaba con intermitencias pero estaban enteros todavía caso el arquero Oscar Ibáñez, Carlos Lobatón, Paolo Maldonado, Santiago Acasiete, Juan Carlos Bazalar, el paraguayo Carlos Lugo, Germán Carty y Alessandro Morán.
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A raíz de esta exitosa experiencia, Freddy Ternero presentó su libro “Sí se puede”, texto que relata lo que vivió en Cienciano, los triunfos y las cosas duras que tuvo que afrontar el equipo “por la lucha contra algún tipo de sistema que hay en el país”.
Tiempo después de conseguir la Copa Sudamericana, Freddy Ternero contó en qué circunstancias pronunció por primera vez el «Sí se puede». Eran los días previos a la segunda final ante River Plate y para trabajar la parte mental en el plantel, hizo caminar a sus jugadores sobre brasas calientes.