FLORIDA.- Con escalofriante lujo de detalles, el hispano Fidel López, de 24 años, confesó cómo asesinó y destripó a su novia de origen peruano, María Nemeth, en la madrugada del pasado domingo en un condominio de la ciudad de Sunrise.
Los primeros en llegar a la escena del crimen fueron agentes de policía, después de que el asesino, bautizado por la prensa como el “Monstruo de Florida” llamó al 911 para alertar sobre la grave condición en que se encontraba su pareja.
Al confesar su espeluznante crimen, dijo que estaba “muy intoxicado” por lo que en medio de las relaciones sexuales que mantuvo esa noche con María Nemeth, la muchacha pronunció en dos ocasiones el nombre de su expareja.
Enfurecido por los celos rompió objetos y perforó las paredes a puñetazos antes de atacar a la aterrorizada joven con una botella de cerveza y una pinza para rizar cabello, introduciéndole en el abdomen abierto el puño de la mano y el brazo hasta el codo.
Los gritos de la joven no detuvieron a Fidel López quien, con ferocidad diabólica , le sacó los intestinos y después, para tratar de revivirla le echó agua en la cara.
Dijo que, al percatarse que la infortunada mujer había dejado de respirar, llamó al 911 para que sea auxiliada por los agentes policiales.
El Monstruo de Florida fue arrestado el mismo día de la muerte de la joven María Nemeth y presentado ante la Justicia el lunes, en un estremecedor caso que ha conmocionado a la opinión pública estadounidense. (ECHA- Agencias)