MOSCÚ.- El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha viajado este jueves por sorpresa al territorio ruso de Kalingrado, situado entre Polonia y Lituania, poco después de que la OTAN diera inicio a sus mayores maniobras militares desde el inicio de la Guerra Fría, si bien el Kremlin ha asegurado que ambos factores no guardan relación.
Las autoridades rusas sostienen que el objetivo de Putin es reunirse con dirigentes locales y participar en una reunión con estudiantes. «Cuando el presidente visita regiones de Rusia, no está intentando enviar ningún mensaje a países de la OTAN«, ha declarado su principal portavoz, Dimitri Peskov, en declaraciones a los medios.
«Lo lleva haciendo durante años, trabajando para mejorar el país y sus regiones», ha añadido, según informa la agencia de noticias TASS. La Alianza Atlántica tiene previsto desplegar unos 90.000 efectivos en unos ejercicios que simularán un conflicto en Europa.
Peskov también ha evitado confirmar que puedan haberse tomado medidas excepciones en materia de seguridad, recordando que cualquier desplazamiento del presidente ya implica controles «especiales». Así, ha descartado que Rusia haya pedido a Lituania un corredor aéreo específico para este viaje, que por tierra implica cruzar territorio UE.
Tras el inicio de la ofensiva militar rusa sobre Ucrania, los países del bloque comunitario cerraron su espacio aéreo a las aeronaves oficiales de Rusia, por lo que sus altos cargos suelen rodear la zona para sobrevolar aguas internacionales en el mar Báltico.
Europa Press