Arquímedes Puccio fue un criminal argentino que ganó notoriedad como cabecilla de una banda criminal responsable de una serie de secuestros en la década de 1980. Puccio nació el 19 de agosto de 1930 en Argentina. Provenía de una familia de clase media con vínculos con el ejército y la política.
Las actividades criminales de Puccio principalmente implicaban el secuestro de personas adineradas a cambio de rescate. Operaba con la ayuda de miembros de su familia y asociados cercanos, creando una fachada de normalidad mientras cometía sus actividades ilegales. Las víctimas de Puccio incluían a empresarios y profesionales prominentes.
Los crímenes de la banda Puccio conmocionaron a Argentina y atrajeron la atención de los medios de comunicación. La banda fue finalmente detenida por las autoridades argentinas, y Puccio y varios miembros de su familia fueron arrestados y acusados de múltiples secuestros y asesinatos.
Puccio nunca reconoció, sin embargo, sus crímenes y siempre sostuvo ser un patriota y un preso político.
En diciembre de 1985 se lo condenó a reclusión perpetua más la accesoria por tiempo indeterminado. Durante su presidio se convirtió a la religión evangélica y realizó los cursos correspondientes para recibirse de abogado.
En abril del 2008, fue beneficiado con la libertad condicional gracias a la «ley del 2×1» por la cual la Justicia le computó 23 años y ocho meses de prisión.
Arquímedes Puccio fue trasladado al Instituto Correccional Abierto de General Pico La Pampa, luego de que se le revocara la prisión domiciliaria que cumplía en Buenos Aires, por violar las condiciones de la misma,
En General Pico obtuvo la libertad condicional, continuó así viviendo en esa ciudad, donde ejerció como abogado, luego de matricularse en esa provincia. Vivió en la casa de un pastor evangélico y finalmente, luego de convivir con una mujer mucho menor que él, se instaló en una pensión, donde finalmente murió el 4 de mayo del 2013 a los 83 años por una complicación derivada de un accidente cerebrovascular luego de separarse de la pareja con la que vivía. Nadie reclamó su cuerpo y fue enterrado en una fosa común.
El director de cine Pablo Trapero hizo una película titulada El Clan basada en los hechos delictivos de la familia Puccio. La película, protagonizada por Guillermo Francella y Peter Lanzani, se estrenó el 13 de agosto de 2015 en Argentina y ha sido la más taquillera del año en ese país. En la película hay una licencia dramática: el hijo Daniel «Maguila» no estaba presente en el principio del film pero en la realidad el hijo participó de todos los secuestros.
Además en septiembre de 2015 se estrenó la miniserie Historia de un clan por Telefe, que también retrata los delitos cometidos por la familia. La misma fue dirigida por Luis Ortega y protagonizada por Alejandro Awada y el Chino Darín. Existe una remake mexicana de esta titulada El secreto de la familia Greco, rodada el 2022.
Otros datos
Orígenes familiares: Arquímedes Puccio provenía de una familia de clase media alta en Argentina. Su padre, Epifanio Puccio, era un militar y había sido parte del gobierno de facto de Juan Domingo Perón.
Actividades criminales: Arquímedes Puccio lideró una banda criminal conformada por su propia familia y algunos amigos cercanos. Entre 1982 y 1985, cometieron una serie de secuestros extorsivos, principalmente dirigidos a personas adineradas.
Método de operación: la banda de Puccio mantenía una apariencia de normalidad en su vecindario mientras perpetraba sus actividades criminales. Solían secuestrar a sus víctimas y exigir grandes sumas de dinero como rescate a cambio de su liberación.
Colaboradores familiares: la participación de miembros de la familia Puccio en los secuestros resultó fundamental para el éxito de la banda. Sus hijos, Alejandro y Daniel Puccio, así como su esposa, Nélida Raquel Ibáñez, estuvieron involucrados en los crímenes.
Arresto y juicio: la banda fue desmantelada en 1985 después de que uno de sus secuestros fracasara y la policía descubriera pruebas incriminatorias en la casa de los Puccio. Arquímedes y varios miembros de su familia fueron arrestados y enfrentaron juicio por secuestro y asesinato.
Condena y encarcelamiento: En 1985, Arquímedes Puccio fue condenado a cadena perpetua por su papel en los secuestros y asesinatos. Pasó los siguientes años en prisión hasta su fallecimiento en 2013.
El caso de la banda de Arquímedes Puccio es considerado uno de los episodios más oscuros y perturbadores en la historia criminal argentina y ha sido objeto de numerosas obras literarias, documentales y producciones cinematográficas.
¡El crimen no paga!
Foto Cedoc/ captura