Un tribunal japonés rebajó hoy a cadena perpetua la pena para el peruano Jonathan Nakada por haber asesinado a seis personas en Kumagaya (norte de Tokio) en 2015, anulando así una sentencia anterior que le condenaba a pena de muerte.
Nakada, de 34 años y hermano del mayor asesino en serie de la historia de Perú, fue condenado en marzo del año pasado a la pena capital por los delitos de robo y asesinato por el Tribunal del Distrito de Saitama, tal y como reclamaba la acusación.
La fiscalía solicitó entonces la pena máxima para Nakada por haber cometido «crímenes extremadamente crueles e inhumanos», y entre cuyas víctimas se encontraban dos menores de edad.
Esta sentencia ha sido ahora revocada por el Alto Tribunal de Tokio tras tener en cuenta el recurso de apelación presentado por la defensa, que mantenía que el acusado padece esquizofrenia y por tanto no podía ser responsable jurídicamente de sus actos, según informó la cadena estatal NHK.
La instancia judicial tokiota decidió así condenar a cadena perpetua a Nakada, quien se declaró inocente de todas las acusaciones que pesan en su contra durante sus comparecencias ante el tribunal.
Nakada llevaba una década residiendo en Japón en el momento de los crímenes y permanece detenido desde octubre de 2015.
Se le acusaba de irrumpir en tres casas de Kumagaya, robar dinero y objetos de valor y asesinar a sus inquilinos, entre ellos una madre y sus hijas de 10 y 7 años.
De nombre completo Vayron Jonathan Nakada Ludeña, el condenado es hermano de Pedro Pablo Nakada Ludeña, el «Apóstol de la muerte», quien en 2007 recibió una pena de 35 años de cárcel por el asesinato de 18 personas, aunque fue posteriormente internado en un psiquiátrico debido a su esquizofrenia paranoica. EFE