EL CAIRO.- Las autoridades saudíes retiraron hoy un video lanzado hace apenas cuatro días por el Directorio General para Combatir el Extremismo, después de que las redes sociales se incendiaran por considerar extremista el feminismo, el ateísmo o la homosexualidad.
La grabación, borrada este martes de la red social sin explicación alguna, mostraba un triángulo lleno de palabras como feminismo, ateísmo, fanatismo deportivo o pornografía, mientras una voz femenina alertaba de que «sobrepasar la moderación» a la hora de adoptar o rechazar una ideología es «extremismo».
También señalaba que adoptar una opinión y luchar contra las demás es radicalismo y las imágenes equiparaban a un padre que grita a su hijo con un hombre que amenaza a otro desarmado con una pistola.
«Y viceversa, el desvío (de la moderación) se llama extremismo, pero de otro tipo, y el desvío en todas sus formas es rechazado», asegura la voz de mujer.
Cuando esta última frase se oye, un dibujo animado se enfrenta a dos nubarrones sobre su cabeza, en uno de los cuales se lee «ateísmo, feminismo, homosexualidad y pornografía», mientras que el otro menciona acciones como «poner una bomba».
Amnistía Internacional (AI) consideró hoy «indignante» la inclusión de estos términos como formas de extremismo, lo que contradice la «falsa» imagen reformista que el príncipe heredero, Mohamed bin Salman (foto), ha tratado de propagar ante la opinión internacional.
«Feminismo, ateísmo y homosexualidad no son actos criminales, este anuncio es extremadamente peligroso y tiene serias implicaciones para los derechos de libertad de expresión y a la vida, libertad y seguridad en el país», advirtió la directora de AI para Oriente Medio, Heba Morayef.
Arabia Saudí ha sido a menudo criticada por su presunta exportación del extremismo islámico, que habría inspirado a diversos grupos.
En los últimos días la ultraconservadora sociedad saudí también se dividió en internet entre quienes criticaban y aplaudían el video en Twitter o Facebook.
La polémica surge después de que en los últimos meses Arabia Saudí experimentase un aparente aperturismo, con medidas como permitir a las mujeres conducir o salir del país sin permiso de su tutor masculino e,incluso, una inesperada mano abierta en lo relativo al mundo del entretenimiento.
Sin embargo, una chica que baila en público será muy posiblemente arrestada, al igual que ocurriría si se atreviera con una muestra de afecto a un varón fuera de su hogar.
El ateísmo es un crimen que puede ser castigado con la pena capital.
Con decenas de activistas encarcelados o exiliados por expresar sus ideas o defender los derechos de la mujer, quizás los reproches más feroces lleguen de fuera de las fronteras saudíes.
«Sí, esto es una noticia de verdad, no es (el diario satírico) ‘The Onion'», escribió en Twitter el investigador egipcio de Human Rights Watch Amr Magdi.
La usuaria Danah Almayouf, una fotógrafa saudí exiliada en EEUU que se define como «feminista», recriminaba cómo en su país ahora «ser ateo, homosexual y feminista es igual a poner una bomba contra gente inocente y matarla».
«2030 es un chiste», concluye la joven, en alusión al proyecto «Visión 2030», aprobado en 2016 por el gobierno saudí para reducir la dependencia del petróleo y desarrollar las inversiones, así como una serie de reformas sociales impulsadas por el príncipe heredero en 2017 como el levantamiento del veto de conducir a las mujeres.
Pero otros, como un usuario con decenas de miles seguidores que se hace llamar Su Excelencia, defiende que el feminismo es un «germen ajeno» a la sociedad saudí que no descansa hasta que «arruina familias» y al que odia la «castidad y bondad».
«Por fin el feminismo fue registrado en la lista de extremismo, haced escuchar vuestros gritos, vosotros y los que os apoyan son los corderos de los liberales», clama en Twitter Mohamad abu Turki, quien afirma ser trabajador social.
EFE/Foto: thetimes.co.uk