No hay indicios de maniobras políticas ni nada inusual en la orden de captura que se reafirmó contra los tíos de Keiko Fujimori, porque ese tipo de solicitudes internacionales se renuevan de forma semestral, indicó el exprocurador anticorrupción, Julio Arbizu.
En declaraciones a la Agencia Andina, señaló que incuso cuando un sentenciado es declarado reo contumaz “se suspende el plazo de prescripción” de los delitos que se le imputan.
Dichos plazos son retomados y contabilizados nuevamente cuando estas personas vuelven a ser objeto de procesos judiciales y dejan la condición de no habidos, explicó.
En tal sentido, Arbizu calificó de “aprovechados o ignorantes” los comentarios que apuntan a que los delitos perpetrados por Rosa, Juana y Pedro Fujimori, así como por Víctor Aritomi, ya prescribieron por datar de hace casi dos décadas.
“Ellos son reos contumaces”, recordó el ex abogado del Estado.
Dijo también que resulta positivo que desde el Poder Judicial se informe sobre la vigencia de estos pedidos de captura y también que se renueven.
“El Estado tiene que hacer un esfuerzo para que estas órdenes siempre estén vigentes y así cuando estas personas salgan de los países en los que se encuentran, se les capture”, remarcó.
El problema con el clan Fujimori reside en que todos ellos fugaron a Japón porque tenían nacionalidad nipona. “Sabían que ese país no extradita a nacionales”, manifestó el exprocurador.
“Lo mismo ocurre con Ernesto Schütz, en Suiza; y con el traficante de armas Enrique Benavides, en Alemania”, subrayó Arbizu.
Según el Poder Judicial, los hermanos Fujimori, así como Aritomi (esposo de Rosa Fujimori) tienen orden de captura internacional vigente por su participación en el supuesto tráfico ilegal de ropa usada que llegó en donación desde el extranjero en los años 90.
Esto ha sido rechazado por los sectores políticos vinculados al fujimorismo, quienes toman esta reiteración como un intento de afectar negativamente la imagen de su lideresa. (Andina)
