BUENOS AIRES.- La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) puso en marcha este jueves un protocolo para que tanto víctimas como familiares directos de desaparecidos durante la última dictadura (1976-1983) consulten los archivos eclesiales.
«Con este protocolo se inicia la posibilidad de consultas y, de acuerdo a lo anunciado oportunamente, podrán solicitar información: las víctimas, los familiares de los desaparecidos y detenidos y, en caso de eclesiásticos y religiosos, sus respectivos obispos y superiores mayores. La consulta se realizará sobre el material donde aparece mencionada la persona sobre la cual se busca información», aseguró la CEA en un comunicado de prensa.
El 25 de octubre pasado, la CEA había asegurado que terminó con el proceso de digitalización de documentos que estaban en poder tanto del Episcopado como de la Nunciatura Apostólica y de la Secretaría de Estado del Vaticano.
Estos documentos, según la agencia estatal Télam, consisten en cartas y otra clase de escritos sobre requerimientos que llegaron a la Iglesia católica para saber si conocían de la suerte de detenidos y desaparecidos durante la dictadura y «reclamar acciones ante los militares».
Conforme a lo que consta en un documento del Registro Unificado de Víctimas del Terrorismo de Estado (Ruvte) la cifra de víctimas de desaparición forzada durante los siete años de la dictadura fue de 7.018, mientras que los de asesinato ascendieron a 1.613. En Argentina, las organizaciones de Derechos Humanos siempre han sostenido que la cifra de desaparecidos asciende a 30.000.
El primer gran informe sobre esta problemática durante la dictadura lo publicó en 1984 la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas (Conadep) (ECHA-Agencias).