El delantero uruguayo Luis Suárez tiene el gol entre ceja y ceja, los marca de todos los colores y representa la avidez frente a los tres palos y la solvencia al horadarlos en un equipo, el Barcelona, marcado por el genio argentino Lionel Messi y el virtuosismo brasileño de Neymar Junior.
Un pase al pie que el de Rosario no perdonó y un robo de balón que acabó en gol sirvieron ayer para que el Barcelona venciera en Éibar, uno de esos campos correosos y duros en los que hay que ganar para ir a por la Liga; y también para confirmar a la pareja goleadora más percutiente y eficaz de las ligas europeas.
Treinta goles en esta temporada, quince cada uno, dan fe de la compenetración entre Lionel Messi y Luis Suárez, y de su asociación permanente desde que el uruguayo llegó al Nou Camp en el verano del 2014 procedente del Liverpool inglés, acompañado de la polémica, avalado por su eficacia y mirado con lupa por su coste millonario.
Al cabo de tres temporadas en Barcelona, esas circunstancias se han disipado por la ausencia de incidentes mayores, por la cantidad de goles que ha marcado con la camiseta blaugrana y por la certeza de que los más de ochenta millones de euros pagados por el delantero han sido amortizados con creces.
Homónimo del único Balón de Oro español, el gallego Luis Suárez que fue ídolo en Barcelona y en el Ínter de Milán, el internacional uruguayo llegó a Barcelona tras una larga trayectoria en la que ya ha sumado más de 300 goles en equipos como el Nacional de su país, el Groningen holandés, el Ajax de Amsterdam y el Liverpool.
En todos ellos, el punta charrúa ha sido el mismo, pertinaz en el acoso y perspicaz en los espacios para buscarse ese ángulo de tiro de los privilegiados y que a él le ha valido para lograr en dos ocasiones la Bota de Oro, galardón que reconoce al máximo goleador de las ligas europeas.
Luis Alberto Suárez es uno de los delanteros más destacados de su país, si no el que más, junto a nombres que también han triunfado en Europa como Diego Forlán, Edison Cavani o, más lejanos en el tiempo, ‘El Chino’ Recoba, ‘El Rifle’ Pandiani o el mítico Fernando Morena.
Pese a su regularidad ante el gol y su aportación al Barcelona (junto a Messi ha marcado 30 de sus 51 goles de esta temporada), Luis Suárez suele mantener un perfil discreto frente a los astros con los que conforma el tridente blaugrana llamado la ‘MSN’, acrónimo de sus componentes: Messi, Suárez y Neymar.
Este perfil, trabajado a conciencia desde el 24 de junio del 2014, cuando fue sancionado por el mordisco a Giorgio Chiellini en el Uruguay-Italia del Mundial de Brasil, es el que ha podido hacer que al charrúa le falte ‘la literatura’ que sí acompaña a otros goleadores cuyos registros están a años luz de los suyos.
Luis Suárez lo apuntó al afirmar que había futbolistas «con más ‘marketing'» que él, en relación a su ausencia entre los tres finalistas al Premio al Mejor Jugador de la FIFA 2016.
«Priorizo lo grupal y lo que ganas a nivel colectivo. Tampoco le doy mucha importancia a eso y, además, yo siempre dije que hay jugadores con más marketing que yo», manifestó su día Suárez, quien sigue a lo suyo, marcando goles.
EFE/Foto: elnuevoherald.com
https://www.youtube.com/watch?v=XcZhf9fR2Pw