La película filipina A Lullaby to the Sorrowful Mystery, incluida entre las 18 aspirantes al Oso de la Berlinale, dio un formato insólito al festival, con una única sesión de gala de más de nueve horas de duración para la sección a concurso.
Se trata del filme más extenso en la historia de ese festival, rodado en blanco y negro y sobre el trasfondo de las crueldades de la guerra de la independencia del archipiélago frente al poder colonial de España.
A las 21:00 horas de Berlín, la alfombra roja dio la bienvenida festival al equipo en pleno de la película, encabezado por el director Lav Díaz, y parte de su elenco, vestidos de gala, lo mismo que el realizador del festival, Dieter Kosslick.
Team Hele sa Hiwagang Hapis in Berlinale! Please bring home the Golden Bear guys pic.twitter.com/XXFh3oRDGW
— Richard Bolisay (@richardbolisay) February 18, 2016
La película, de 485 minutos de duración, se proyecta en una sesión mixta, entre público, invitados y prensa acreditada, con una pausa de una hora en medio para dar un receso al espectador.
La extensión se debe a su deliberado ritmo lento, con largas escenas rodadas con cámara fija, sean de diálogo entre los distintos protagonistas o de acción, con las que Lav Díaz reconstruye ante el espectador la lucha por la independencia en Filipinas.
EFE