La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) presentó ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) el caso de una mujer a quien se practicó una ligadura de trompas sin su consentimiento en Bolivia, lo que supuso una esterilización forzada, informó hoy el organismo panamericano.
A la mujer, que sólo fue identificada por las iniciales I.V., se le practicó una salpingoclasia bilateral o ligadura de trompas en un hospital público de Bolivia el 1 de julio del año 2000 sin haber recibido los médicos su consentimiento informado y sin que se tratara de una situación de emergencia.
A consecuencia de la operación, realizada tras la práctica de una cesárea, la mujer quedó en una situación de «esterilización permanente y forzada», lo que, de acuerdo con la CIDH, «constituyó una violación a la integridad física y psicológica de la señora, así como a su derecho a vivir libre de violencia y discriminación».
Además, la Comisión concluyó que el Estado no proveyó a la víctima de una respuesta judicial «efectiva» frente a tales vulneraciones.
Anteriormente, la CIDH había recomendado al Estado de Bolivia «reparar integralmente a I.V.» por «las violaciones de derechos humanos establecidas», tomando en consideración su perspectiva y sus necesidades, incluida la compensación de los daños materiales y morales sufridos.
También se había instado a Bolivia a proporcionarle «un tratamiento médico de alta calidad, individualizado según sus necesidades y adecuado para tratar las patologías que padece», y a «investigar los hechos relativos a la esterilización no consentida de I.V. y establecer las responsabilidades y sanciones que resulten procedentes».
La CIDH sometió el caso a la jurisdicción de la CorteIDH el 23 de abril de 2015 porque consideró que «el Estado de Bolivia no cumplió con las recomendaciones» que se le habían realizado. EFE
Imagen: mexico.servidornoticias.com