LA PAZ (Bolivia).- La presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, lanzó este sábado una convocatoria a un «diálogo político nacional» sobre la fecha de las elecciones generales, cuyo nuevo aplazamiento de septiembre a octubre por la pandemia de la COVID-19 desató protestas en el país.
El llamado a dialogar este domingo está dirigido a los dirigentes de la Central Obrera Boliviana (COB), promotores de las protestas, pero además a los vocales del organismo electoral, a todos los candidatos y a los presidentes de las cámaras de Diputados, Sergio Choque, y de Senadores, Eva Copa.
La Iglesia católica también ha sido invitada a ser parte del diálogo como observadora, según una nota firmada por Áñez, que también es candidata por la alianza Juntos.
El objetivo del encuentro «es confirmar la fecha electoral y suspender los bloqueos que están impidiendo el paso de oxígeno para los pacientes de COVID-19», señaló la mandataria en su convocatoria.
«La convocatoria a este diálogo la hago pensando en la vida, pensando en la salud, pensando en la democracia y pensando en la paz social», concluyó.
Los bloqueos de carreteras se suceden desde el pasado lunes en contra del aplazamiento del 6 de septiembre al 18 de octubre de las elecciones generales en el país y están convocadas por organizaciones como la COB, aliada política del partido de Evo Morales, y el denominado Pacto de Unidad que agrupa a sindicatos de indígenas y campesinos afines al exmandatario.
El suministro de oxígeno medicinal ha generado una notable preocupación en el país, donde el Gobierno interino culpa de los problemas de abastecimiento a estas protestas, cuyos convocantes aseguran por el contrario que permiten el paso de camiones cisterna.
El Gobierno interino ha hecho «puentes aéreos» para llevar oxígeno a distintas regiones, pero los gremios médicos y administraciones de hospitales han alertado de que lo que les llega es insuficiente para atender tanto a los enfermos de la COVID-19 como a otros pacientes.
https://youtu.be/OdSeprNjRUI
El Ejecutivo transitorio ha denunciado ante la Organización de Estados Americanos que al menos 31 enfermos fallecieron en Bolivia por falta de oxígeno medicinal debido a los bloqueos de carreteras.
Los manifestantes por su parte denuncian que les culpan sin pruebas de los problemas de abastecimiento para ocultar una mala gestión gubernamental ante la pandemia y justificar lo que califican de represión por motivos políticos.
Los bloqueos aún no han sido intervenidos, aunque sí ha habido advertencias de las autoridades nacionales de que se levantarán por la fuerza si persisten.
Bolivia tiene oficialmente 3,524 fallecidos y 87,891 contagiados por el nuevo coronavirus entre sus once millones y medio de habitantes.
El país tiene pendientes sus comicios generales desde la anulación de los de octubre del 2019 entre denuncias de fraude, aún bajo investigación judicial, a favor de Evo Morales, que había sido declarado vencedor pero anunció su renuncia denunciando que era presionado por un supuesto golpe de Estado para negarle su triunfo.
⊕