MADRID (España).- Las principales Bolsas europeas han encadenado una nueva jornada al alza, animadas por la mayor apertura de las grandes economías, por el plan de recuperación propuesto por la Comisión Europea (CE) y por la mejora de la confianza de los consumidores y los empresarios en la Unión Europea (UE).
Milán ha subido un 2.46%; París, un 1.76%; Londres, un 1.21%; Fráncfort, un 1.06%; y Madrid, un 0.69%.
El índice Eurostoxx50, que engloba a las 50 empresas europeas de mayor capitalización, ha subido un 1.67%.
Los inversores han recibido con optimismo la noticia de que la confianza de consumidores y empresarios de la UE registró en mayo los primeros síntomas de recuperación tras los fuertes descensos de abril y marzo, al aumentar 2,9 puntos y situarse en 66,7 puntos.
Estas cifras han impulsado a los mercados de renta variable a pesar de las previsiones para este año del instituto económico alemán Ifo de una caída del Producto Interior Bruto (PIB) de Alemania del 6.6%, lo que supondría una contracción mayor que la registrada en el 2009.
Otro dato negativo es que el desesempleo registrado en Francia se incrementó un 22% en abril hasta 4’575,500 demandantes de empleo, la cifra más elevada desde el comienzo de la serie en 1996.
Los mercados de Estados Unidos subían también, a pesar de que más de 2.12 millones de personas solicitaron la semana pasada el subsidio por desempleo, con lo que suman más de 41 millones en dos meses. No obstante, la cifra semanal ha ido descendiendo a medida que más estados permiten la reapertura del comercio.
Además, la economía estadounidense se contrajo a una tasa anual del 5% en el primer trimestre, la primera caída trimestral desde la crisis financiera del 2008.
El índice Dow Jones de industriales subía un 0.54%, el S&P un 0.69% y el Nasdaq un 0.75% a la hora del cierre de los mercados europeos.
El Brent se recuperaba de la tendencia negativa de la jornada anterior y el contrato de futuros con vencimiento en julio subía un 1.18%, mientras que el del West Texas Intermediate (WTI) lo hacía un 3.90%.
El euro subía hasta un valor máximo de ocho semanas y se cambiaba a 1.1072 dólares.
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