En plena pandemia del coronavirus el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ignoró la contención en eventos sociales recomendada por las autoridades sanitarias y participó este domingo en una marcha en favor de su Gobierno y contra el poder Legislativo y Judicial.
Mientras el país se prepara para un aumento de casos -aún no sobrepasa los 200-, Bolsonaro alentó a miles de brasileños a salir a las calles, a pesar del riesgo de propagación del virus en las aglomeraciones, y se dio un breve baño de masas en la capital Brasilia.
«Eso no tiene precio (…). No es un acto contra nada, es un acto a favor de Brasil», afirmó el mandatario, quien retransmitió parte de la protesta en directo en Facebook y fue recibido por la multitud a las puertas del palacio presidencial a los gritos de «mito».
Las críticas a la actitud del presidente, que la semana pasada minimizó el impacto del coronavirus, vinieron de varios frentes.
Joao Doria, el gobernador de Sao Paulo, la región más rica y poblada de Brasil, consideró que la participación de Bolsonaro en la protesta fue «inadecuada e impropia».
En las manifestaciones en favor del jefe de Estado, hubo alegatos en favor de la dictadura y en contra el parlamentarismo y del Poder Judicial.
Los seguidores de Bolsonaro opinan que tanto el Legislativo (Cámara de los diputados y Senado) como el Judicial obstaculizan deliberadamente todas las reformas que aprueba el presidente con el objetivo de desgastarlo.
Brasilia, Rio de Janeiro y Sao Paulo fueron las ciudades que sumaron más participantes a las marchas.
TENSA ESPERA EN UN CRUCERO
En el noreste de Brasil, continua por resolverse la tensa situación del crucero en cuarentena que está desde el jueves en la ciudad de Recife debido a la confirmación de un caso de coronavirus -un canadiense septuagenario en estado grave- y la sospecha de otro.
Los 607 ocupantes del navío, entre ellos tres españoles y once latinoamericanos, aguardan la confirmación de las autoridades para poder regresar a sus países de origen.
Según desvelaron a EFE fuentes oficiales, hay ocho mexicanos, diez brasileños y dos uruguayos en el navío Silver Shadow, de pabellón de las Bahamas y de la empresa Silversea Cruises. También constan un argentino, un peruano y un ecuatoriano.
Según fuentes locales, muchos ocupantes comienzan a dar señales de desespero y claustrofobia por su situación.
Fuentes diplomáticas de España señalaron a EFE que el cónsul general para la región Nordeste de Brasil, Gonzalo Fournier Conde, se desplazará en las próximas horas a Recife para dar «asistencia» a los tres españoles que están en el navío.
A su vez, el embajador español, Fernando García Casas, ya entró en contacto con las otras Embajadas y con las autoridades de Pernambuco para dar una «solución rápida y segura».
EL PAÍS DEL FÚTBOL EN CUARENTENA
La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) anunció este domingo la suspensión por tiempo indeterminado de todas las competiciones nacionales que están bajo su coordinación a partir de este lunes.
«Sabemos y asumimos la responsabilidad del fútbol en la lucha contra la expansión del COVID-19 en Brasil«, afirmó el presidente de la CBF, Rogério Caboclo, en un comunicado.
De momento, están suspendidos todos los partidos previstos en los campeonatos que ya están en marcha en el país, que son la Copa de Brasil, los Campeonatos Brasileños Femeninos A1 y A2, el Campeonato Brasileño Sub’17 y la Copa de Brasil Sub’20.
Según la CBF, con respecto a los campeonatos regionales, como el Paulista o el Carioca, cada entidad organizadora deberá realizar deliberaciones específicas y la «autonomía local» será «respetada».
La entidad no informó una fecha para que las competiciones sean reanudadas, pero indicó que «seguirá en permanente contacto con el Ministerio de Salud» para que todo vuelva a la normalidad «lo antes posible».
INICIO DE LAS RESTRICCIONES
A partir de este lunes, al menos 11 de los 27 estados brasileños pondrán en marcha restricciones a la población en un intento de frenar la expansión del COVID-19.
La suspensión de eventos masivos en casi todo el país y de las clases en colegios y universidades figuran entre las medidas de contención.
Según el último balance oficial, los casos confirmados de coronavirus subieron en un día de los 121 a los 200.
Tanto en Rio de Janeiro como en Sao Paulo se ha detectado transmisión local del virus. EFE