RÍO DE JANEIRO.- El presidente electo ultraderechista, Jair Bolsonaro, reducirá el Gabinete menos de lo inicialmente anunciado pero sí mantiene los planes de nombrar ministros a generales retirados, incluido su vicepresidente.
Su equipo de gobierno ratificó que las reformas economías son la prioridad –empezando por las pensiones y las privatizaciones— y que iniciará su gira internacional con Chile, Estados Unidos e Israel.
Aún convaleciente de un atentado que sufrió en campaña, Bolsonaro estuvo en silencio y recluido en su casa de Río de Janeiro mientras su equipo anunciaba los primeras proyecciones de su gobierno entrante.
De esta manera comienza la transición hacia un Gobierno liderado por un nostálgico de la dictadura tras cuatro Gobiernos progresistas del Partido de los Trabajadores y uno de centroderecha. Ganó por un 55% contra el 44% del petista Fernando Haddad con promesas de mano dura contra el crimen y reformas para liberalizar la esclerótica economía.
El presidente Donald Trump habló con Bolsonaro tras la victoria. “Acordamos que vamos a colaborar en comercio, (asuntos) militares, ¡y todo lo demás!”, tuiteó el mandatario estadounidense.
Aunque anunció que reduciría los ministerios a la mitad, las presiones recibidas en las últimas semanas le han llevado a matizar a que de las 29 carteras actuales quedarán en unos 18, y no en los 15 que pretendía.
Lo más probable que es Medio Ambiente no se fusione con Agricultura, algo que no convencía a los ambientalistas ni al sector agroganadero, ni Industria y Comercio, a Hacienda.
Augusto Heleno Ribeiro cuenta con la admiración de Bolsonaro. Este general fue su instructor en la escuela militar en los años 70 y sería su ministro de Defensa.
El oficial retirado, que se desempeñó como comandante en jefe de la Misión de la ONU en Haití (Minustah), pudo haber sido vicepresidente de Bolsonaro, pero el Partido Republicano Progresista, del que forma parte, rehusó la nominación. (ECHA- Agencias)