GOIÁS/Brasil.- Una banda de delincuentes voló con explosivos un muro de la cárcel de Goiana, para propiciar una fuga masiva en la que lograron escapar 11 presos, 60 fueron detenidos y 7 resultaron heridos por la detonación.
Los cómplices de los reos ocuparon una vivienda vecina al presidio y usaron potentes explosivos para abrir un hueco y permitir la operación, sin calcular que las ondas expansivas alcanzaran a siete reos que resultaron heridos, destruyendo totalmente la vivienda, informaron fuentes penitenciarias.
La fuga se registró en el presidio de Guapó, municipio en el área metropolitana de Goiania, la capital del estado de Goiás (centro), hacia las 08.30 de la mañana (hora local, 11.30 GMT) de este martes, informó en un comunicado la Superintendencia regional de Administración Penitenciaria.
La casa vecina del penal de Guapó fue destruida totalmente por la violenta explosión que hirió a siete presos que aguardaban en el patio del presidio.
El Gobierno regional de Goiás anunció que adoptó medidas de emergencia para trasladar a los seis internos heridos a un hospital y a los restantes 60 presos a otros centros de reclusión.
Según las informaciones preliminares de la Policía, los criminales llegaron hasta una vivienda vecina al presidio en dos vehículos, invadieron la residencia y colocaron explosivos en los muros antes de huir con rumbo desconocido. Uno de los residentes en la vivienda explosionada también sufrió heridas.
Hace sólo ocho días dos presos murieron y 30 huyeron de una cárcel de Sao Luis, la capital del estado de Marnaho (nordeste), luego de que uno de los muros de la prisión fuera igualmente volado con explosivos.
La semana pasada cerca de 90 presos huyeron por un túnel de más de 30 metros de extensión de una cárcel en el estado de Río Grande do Norte (nordeste).
El hacinamiento y las pésimas condiciones de los presidios es uno de los mayores problemas del sistema carcelario brasileño, que alberga en sus prisiones a 654,372 presos, un número en un 76% superior a su capacidad, según datos oficiales.
Brasil vivió una de sus peores crisis carcelarias a comienzos de este año después de que en varias prisiones de los estados de Amazonas, Roraima y Río Grande do Norte se registraran enfrentamientos entre reos de distintas facciones criminales, que dejaron cerca de 150 muertos. (ECHA – Agencias)