RÍO DE JANEIRO.- El presidente Michel Temer enfrentó otra rechifla durante la apertura de los Juegos Paralímpicos, los primeros que se celebran en Sudamérica, y horas después tuvo que afrontar las manifestaciones de protesta en 40 ciudades.
En un estadio Maracaná colmado, miles de personas gritaron el slogan popularizado entre los opositores,»Fuera Temer», en una réplica de lo que ya ocurrió el 5 de agosto en el arranque de los Juegos Olímpicos.
En San Pablo, la capital económica del país, varios grupos marcharon por el centro gritando consignas antigubernamentales. De acuerdo con los organizadores, la convocatoria reunió unas 10.000 personas hacia el mediodía. La policía no informó sobre la cantidad de participantes.
En Belo Horizonte, capital de Minas Gerais (sudeste), los movimientos que convocaron la protesta informaron de la adhesión de unas 30.000 personas.
Las manifestaciones contra Temer tuvieron lugar en 40 ciudades, según informó el portal G1.
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La celebración por los 194 años de la independencia y estas manifestaciones ocurren una semana después de que Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT), fuera removida del poder por el Senado, que la declaró culpable de manipular las cuentas públicas y, por ello, de violar la Constitución.
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Las protestas se acoplaron este año a una tradicional manifestación popular denominada «Grito de los excluidos», que desde 1995 utiliza el Día de la Independencia para reivindicar derechos sociales.
En la mañana
En medio de silbidos, gritos de «¡Fuera Temer!» y «¡Golpista!», así como de aplausos y consignas favorables, el presidente de Brasil encabezó este miércoles por la mañana en Brasilia la conmemoración del Día de la Independencia junto a su esposa y varios ministros.
En su primer gran acto público desde que asumió la presidencia la semana pasada, Temer no desfiló en el automóvil Rolls Royce convertible de los años 50 –como es tradición en esta fecha– ni lució la banda presidencial sino en un vehículo blindado.
Para enfrentar el déficit que se disparó en los últimos años e intentar revertir la profunda recesión económica que atraviesa Brasil, Temer anunció que emprenderá un severo ajuste fiscal, con una delicada reforma del sistema de jubilaciones en vista.(ECHA-Agencias)