ROMA, 1 sep.- El comisario de Economía de la UE, Paolo Gentiloni, advirtió hoy en Roma al Gobierno italiano de que los más de 200.000 millones que podrá solicitar a la Unión Europea en el marco del Fondo de Recuperación deben servir para superar la crisis económica derivada de la emergencia del coronavirus y no para bajar impuestos.
Italia podrá percibir ayudas por valor de hasta 209.000 millones del Fondo de Recuperación europeo, de los cuales casi 82.000 serán en forma de transacciones y unos 127.000 como créditos.
Gentiloni compareció este martes ante las comisiones de presupuesto y políticas de la UE de la Cámara de los Diputados y del Senado y explicó que usar los 200.000 millones para bajar los impuestos a los ciudadanos «sería un mensaje equivocado».
Expuso que los planes de los países europeos que soliciten las ayudas no deberán ser «un resumen de las necesidades y emergencias», sino un proyecto que sirva para sacar a esos países de la crisis derivada de la pandemia del coronavirus.
Concretamente, para Italia, el plan del Gobierno nacional tendrá que ser una hoja de ruta que dé respuesta «al bajo crecimiento y al alto nivel de endeudamiento público», que Roma estima del 157,6 % del producto interior bruto (PIB) y que amenaza con convertirse en un problema importante si no se ataja cuanto antes.
El comisario europeo de Economía recordó que los países deberán presentar sus borradores con los objetivos generales para mediados de octubre con objeto de iniciar un diálogo con la Comisión, y posteriormente con las autoridades locales y los interlocutores sociales interesados.
La presentación formal de los planes nacionales está prevista para finales de abril de 2021. La Comisión tendrá hasta ocho semanas para proponer al Consejo Europeo su aprobación y éste, a su vez, dispondrá de otras cuatro semanas para dar luz verde por mayoría cualificada.
De esta manera, prosiguió Gentiloni, los países que soliciten las ayudas europeas podrán disponer de los primeros desembolsos en el primer semestre de 2021, que serán equivalentes a un 10 % del total, mientras que el resto se realizarán cada seis meses. EFE