Tras conocerse el informe médico del Instituto de Medicina Legal que determinó que Alberto Fujimori permanece estable y puede recibir tratamiento de forma ambulatoria, el abogado Carlos Rivera, del Instituto de Defensa Legal criticó el papel de la clínica Centenario donde el exmandatario pasó más de 100 días.
Mencionó que el protocolo médico establece que, ante el internamiento de un procesado o sentenciado por el Poder Judicial, la clínica o centro hospitalario emite un informe reservado a la sala penal que corresponde.
Carlos Rivera explicó que el protocolo de comunicación de los centros médicos, en un caso de envergadura como el de Alberto Fujimori, es que su director y el médico tratante informen sobre la salud del interno.
“La clínica o, por lo menos su director, habría estado incurriendo en el delito de resistencia a la autoridad, pues ahora queda claro que el estado salud de Fujimori era estable hace mucho tiempo. No puedo decir si desde el día uno hasta el 100, pero se ha constatado que no tiene condición grave”, señaló en declaraciones a la agencia Andina.
Según indicó, la clínica se ha resistido a dar fecha del alta médica de Alberto Fujimori, y ha dejado que Alejandro Aguinaga, quien no es el médico tratante ni director del centro, informara sobre la condición del exptresidente.
“Aguinaga es médico, pero en este caso más que eso es un correligionario de Fujimori”, recordó.
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A juicio de Carlos Rivera, con el informe de la junta médica del Instituto de Medicina Legal quedó claro que la Clínica Centenario no ayudó a cumplir una decisión judicial, después de que el pasado 3 de octubre el juez Hugo Núñez Julca anuló el indulto a Alberto Fujiomori y dispuso su retorno a prisión.
Advirtió que, con su internamiento médico, Alberto Fujimori desplegó una estrategia política a la par de la legal a fin de mantener en pie el indulto, cuestionado desde que fue otorgado por Pedro Pablo Kuczynski.
“Tenía el objetivo de victimizarse, mostrarse como una persona con una salud resquebrajada. En ese objetivo se alió al Congreso, donde el Apra y fujimorismo aprobaron una ley para dar arresto domiciliario a Fujimori. Con esa estrategia intentó ganarle el vivo al sistema judicial y allí tiene un papel fundamental la Clínica Centenario”, aseguró Carlos Rivera a Andina.