El pedido de la defensa del expresidente Alejandro Toledo para que deje la prisión por afectar su salud mental carece de asidero y no atrasará su extradición, dijo hoy el exprocurador anticorrupción, Julio Arbizu.
Según explicó a la Agencia Andina, el pedido de la defensa del exmandatario es muy complicado de atender, debido a que este tiene ahora condiciones carcelarias más que óptimas.
Por ejemplo, recordó, se encuentra bajo un régimen bastante flexible que le permite visitas frecuentes, llamadas telefónicas, televisión y contacto con otras personas.
«Lo que sostiene su defensa para solicitar la comparecencia, en el sentido de que las condiciones de encierro afectan su salud mental, no tiene asidero», subrayó Arbizu.
Bajo esa perspectiva, sostuvo que el pedido no es más que un incidente dentro del proceso de extradición y será resuelto rápidamente por la justicia de Estados Unidos.
«Se analizará si hay o no condiciones que están afectando su salud, como no las hay seguramente se tomará la decisión sobre el particular en una sola audiencia», dijo.
Arbizu refirió que las extradiciones son procesos que pueden tardar, pero en el caso de Toledo hay un avance, considerando que la solicitud de las autoridades judiciales peruanas está sustentada en la presunción de delitos que figuran tanto en Estados Unidos y el Perú.
«Además, la sanción es alta; por tanto, creo que no debería demorar mucho y en los próximos dos meses debería tomarse una decisión», agregó el abogado.
Sobre el expresidente hay un proceso de extradición por presuntos sobornos recibidos de la constructora Odebrecht para la construcción de la carretera Interoceánica.
En enero pasado, el fiscal coordinador del Equipo Especial Lava Jato, Rafael Vela, dijo ver con optimismo que la extradición de Toledo sea amparada por la justicia de Estados Unidos y pueda ser juzgado en el Perú.
Además, estimó que hacia fines de febrero se formularía acusación penal por el presunto soborno en la licitación de la carretera Interoceánica.
Foto internet/medios-Video TV Perú