ROMA.- Los responsables de la gestión y conservación de la Catedral de Florencia han lanzado una aplicación para permitir que los turistas envíen sus mensajes de forma digital y evitar así que pinten el patrimonio artístico de la ciudad.
La idea ha sido impulsada por la Opera de Santa Maria del Fiore y busca «utilizar los nuevos instrumentos digitales como elemento de disuasión a los actos vandálicos que desfiguran los monumentos de la Catedral de Florencia», informó en un comunicado.
A los turistas, esta idea la han presentado con la frase: «Bienvenidos al campanario de Giotto -la torre de la Catedral florentina-. Desde hace siglos conservamos las obras de arte: desde hoy las escrituras en los muros serán quitadas, pero si dejáis vuestro mensaje digital, lo conservaremos para siempre, como una obra de arte».
Así, los responsables de la Catedral tienen la intención de llamar la atención sobre la destrucción del patrimonio cultural que se genera al practicar pintadas o grabaciones en la superficie con piedras y otras herramientas punzantes.
La aplicación se llama «Autography» y permitirá personalizar el mensaje que se quiera enviar en varios estilos -lápiz, bolígrafo, rotulador, pincel y espray-, colores y superficies.
Posteriormente, el mensaje será conservado en el archivo histórico de la Opera di Santa Maria del Fiore, «donde se guardan documentos de siete siglos de vida: desde los planos de construcción de la Cúpula de Brunelleschi hasta los registros de los bautizados, entre los que se encuentran nombres ilustres como Américo Vespucio».
Las personas que decidan enviar sus mensajes a través de este método, podrán consultarlo en el sitio web de la Catedral de Florencia.
«‘Autography’ es el primer caso de sensibilización contra las pintadas que promueve mensajes en sí mismo pero en ‘otra dimensión’, en la digital», explicó la responsable de redes sociales de la Catedral de Florencia, Alice Filipponi, según el comunicado.
En los últimos meses, los responsables de la Catedral de Florencia se han afanado en «limpiar y eliminar de los muros del interior del campanario de Giotto las inscripciones y las pintadas» que turistas de todo el mundo habían dejado en sus visitas.