BRUSELAS.- El Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha confirmado este miércoles las multas impuestas por la Comisión Europea (CE) a varias aerolíneas, entre ellas Air France, Lufthansa y Singapore Airlines, por pactar los precios de los servicios de carga durante varios años, por lo que mantiene las sanciones fijadas por Bruselas en su decisión de 2017.
La justicia europea, no obstante, ha estimado parcialmente los recursos de otras compañías, como British Airlines y el grupo Latam Airlines, lo que en la práctica supone que revisa a la baja el monto de las multas fijadas en estos casos por el Ejecutivo comunitario.
En una primera decisión adoptada en 2010, la Comisión anunció multa por valor de cerca de 790 millones de euros a una docena de aerolíneas por prácticas ilegales en el sector del transporte aéreo de mercancías, pero el Tribunal General de la UE anuló la decisión por defecto de forma.
Los servicios comunitarios retomaron el caso más tarde y adoptaron una segunda decisión, atendiendo a lo establecido en la primera sentencia, pero manteniendo las aerolíneas acusadas y el valor de las multas. También en este caso la decisión fue elevada con distintos recursos ante el Tribunal con sede en Luxemburgo, que se pronuncia ahora sobre ellos.
En su sentencia de este miércoles, por tanto, el Tribunal europeo desestima los recursos presentados por Martinair Holland, KLM, Cargolux Airlines, Air France, Lufthansa, Singapore Airlines y varias filiales de cargo de estas marcas, de modo que deberán cumplir con el pago de las multas previstas.
Los grupo Air France y KLM deberán hacer frente a un pago solidario de 182,92 millones de euros, a los que deberán sumar 124,44 millones por la actividad asociada AirFance-KLM. En el caso de Lufthana, sin embargo, la multa se mantiene a cero porque la Comisión ya la redujo al 100% por su cooperación durante la investigación.
En el caso de las compañías cuyos recursos han sido estimados parcialmente y, por tanto, sus sanciones se han reducido en parte, son Japan Airlines, Air Canada, British Airways, Cathay Pacific Airways, SAS Cargo Group y otros, Latam Airlines Group y Lan Cargo.
El Ejecutivo comunitario actuó en este caso por un cartel de fijación de precios en el mercado de servicios de transporte aéreo que había afectado a vuelos realizados dentro del espacio económico europeo desde 1999 hasta el 2006.
Los acuerdos consistían en contactos entre las aerolíneas, tanto bilaterales como multilaterales, con el objetivo de fijar el nivel de los recargos por combustible y seguridad.
Fuente: europapress.es