SAN JOSÉ.- La Coalición de Organizaciones por los Derechos Humanos en las Américas emitió hoy un pronunciamiento en el que pide a los países de la región garantizar la financiación y el funcionamiento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que atraviesa por una crisis financiera.
Las organizaciones «suscribimos la presente carta, apelando a todos los Estados miembro de la Organización de los Estados Americanos (OEA), para que tomen las medidas necesarias que garanticen su inmediato y adecuado financiamiento (de la CIDH)».
El pronunciamiento, enviado a Efe por el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL), hace «un llamado urgente a la creación de un fondo sostenible de financiamiento para los órganos del Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH)».
Esto con el fin de «atender la precaria situación que se viene dando desde hace años, tanto en la Comisión como en la Corte Interamericana de Derechos Humanos».
El pasado lunes, la CIDH anunció que suspende todas las vistas y audiencias previstas para este año y que tendrá que despedir al 40% de su personal en julio si los países de la OEA no aportan fondos de manera urgente para paliar la peor crisis financiera de su historia.
La CIDH recibe de la OEA una dotación anual de 4.8 millones de dólares y obtiene otros 5 millones de donaciones de países ajenos al organismo hemisférico.
La Comisión pidió a la OEA que aumente su dotación anual al estimar que el mínimo con el que debería trabajar son 24 millones de dólares.
La Coalición de Organizaciones por los Derechos Humanos en las Américas afirmó en su pronunciamiento de hoy que la CIDH es «un referente internacional por su gran labor de protección a miles de defensoras y defensores de derechos humanos, que viven amenazados y criminalizados en las Américas».
Además, destacó que «este órgano vela por los derechos de los pueblos indígenas y afrodescendientes, de las mujeres y niñas, personas con discapacidad y de las personas LGTBI, entre otros colectivos, en su lucha por erradicar la discriminación».
El pronunciamiento está firmado por cerca de 200 organizaciones del continente, entre ellas el Centro Por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL), la Comisión Colombiana de Juristas (CCJ), Abogadas y Abogados para la Justicia y los Derechos Humanos de México, Abogados sin Fronteras de Canadá, Asociación de Jueves para la Democracia de Brasil.
«Vemos en esta crisis una oportunidad única para consolidar el compromiso de los Estados miembro de la OEA, con los derechos humanos en el continente. Es por eso que les emplazamos a encontrar la manera de construir una estructura sólida y robusta que garantice la protección de las herramientas que el SIDH proporciona a millones de personas en las Américas», concluye el texto.