BRUSELAS.- El yihadista, Salah Abdeslam, considerado el cerebro de los atentados del Estado Islámico, confió a su hermano Mohamed que desea colaborar con Francia, donde será extraditado, por lo que no hablará ante las autoridades belgas.
Mohamed Abdeslam declaró al canal francés BFMTV que su hermano Salah «se negó voluntariamente a explotar» en la ola de atentados de la capital francesa sino se habrían registrado más víctimas peroque “ felizmente, no fue hasta el final».
A su vez, explicó que el terrorista detenido luego de estar prófugo de la Justicia por más de cuatro meses busca ser extraditado a Francia, hecho que sucedería en poco tiempo, ya que «quiere colaborar porque tiene que rendir cuentas pero no a Bélgica».
El pasado jueves la Fiscalía belga confirmó que su país aprobó la extradición, y que en el plazo de 10 días definirían la modalidad de entrega.
Salah fue detenido durante un operativo antiterrorista, y, según indicó la señal VRT, los investigadores creen que el terrorista, junto a otros dos sospechosos, iba a realizar una nueva masacre en la capital de Bélgica con rifles de asalto y otras armas, mientras otros extremistas se inmolarían.
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La noche del 13 de noviembre, el décimo hombre de los atentados yihadistas de París y Saint-Denis, al norte de la capital, contó que debía acudir al Stade de France, sin entrada, «para hacerse estallar».
«Renuncié cuando aparqué el coche. Dejé a mis tres pasajeros y arranqué de nuevo. Circulé sin rumbo fijo», declaró entonces a la policía.
Además, según extractos de las actas de sus declaraciones en Bélgica, citadas por el diario francés Le Monde y por BFMTV el 25 de marzo, Salah Abdeslam minimizó su papel en los atentados. (ECHA- Agencias)