PEKÍN (China).- La tasa de inflación interanual de China se situó el pasado mes de febrero en el 1%, lo que supone una moderación sustancial respecto de la subida de los precios del 2.1% en enero y el menor ritmo de encarecimiento de la vida desde febrero del 2022, según ha informado la Oficina Nacional de Estadística (ONE).
No obstante, el responsable del área de Estadística de ONE, Donj Lijuan, advertía del impacto sobre la inflación de febrero de factores estacionales como la disminución de la demanda de los consumidores después de las celebraciones del Año Nuevo Lunar.
«El aumento interanual ha disminuido más, principalmente debido al distinto mes del Festival de Primavera, y que la base de comparación en el mismo período del año pasado fue relativamente alta», ha apuntado.
En febrero, los precios de los alimentos, el tabaco y el alcohol subieron un 2.1% interanual. En concreto, el precio de la fruta fresca subió un 8.5%, los un 7.8%, los cereales un 2.7% y la carne un 1.9%, incluyendo un encarecimiento de la carne de cerdo del 3.9%.
«Creemos que el IPC se recuperará en los próximos meses debido a los efectos de la reapertura. Pero es poco probable que alcance los niveles observados en otras economías», ha indicado el analista sénior para China de Capital Economics, Julian Evans-Pritchard, anticipando que el IPC promedio este año para el gigante asiático será del 2.5%, por encima del 2% del 2022, pero aún por debajo del techo del Gobierno de «alrededor del 3%».
De su lado, en el segundo mes del 2023 los precios de producción industrial de China se mantuvieron en deflación, ampliando su bajada interanual al 1.4% desde la caída del 0.8% de enero y muy lejos de la subida del 0.5% observada en febrero del 2022.
Fuente Europa Press / foto Twitter