Quizás sea muy difícil encontrar cuál fue el antecedente histórico más antiguo de una investigación criminal, pero esta se encuentra relacionada en las historias bíblicas con el interrogatorio, que viene a constituir una técnica de investigación criminal que cada vez asume mayor rigor científico, señala en un riguroso estudio sobre el tema de la ciencia criminalista y la investigación criminal, el Doctor Cluber Fernando Aliaga Lodtmann, quien se ha constituido en productor y director de un programa de televisión, de corte académico, que saldrá al aire por medio de Bausate televisión universitaria.
El Vicerrector de Investigación Científica de la Universidad Jaime Bausate y Meza, precisó que dicho programa televisivo tiene por finalidad desarrollar en la opinión pública un mayor conocimiento de lo que significa la ciencia criminalista, de tal manera que así se podría tratar de encontrar los antecedentes más remotos de la Criminalista en los antecedentes del interrogatorio, recogiendo datos que nos señalan que en la antigüedad se empleó, el interrogatorio unido a la violencia y a la tortura física, como medio para conocer la «verdad de los hechos sujetos a una investigación».
El programa contará con cincuenta capítulos y explicará cómo, por ejemplo, los griegos que lograron grandes avances en filosofía y matemáticas emplearon técnicas de tortura en sus interrogatorios, con el convencimiento de que era necesaria la violencia «para que los imputados gritaran la verdad de sus conciencias». El mismo Aristóteles, agregó, consideraba el uso de la tortura como medio para obligar a los sospechosos de soltar la versión que los jueces necesitaban. Usos similares de la tortura se registraron en la Roma antigua y otras civilizaciones.
En otro pasaje de su exposición del programa, que contará con invitados especializados en ciencia criminalista, el Doctor Aliaga recordó que en la historia del Perú encontramos una gran cantidad de interrogatorios con torturas practicadas por los conquistadores españoles a los indígenas y patriotas, con la finalidad de obtener información de los rebeldes que luchaban contra la opresión española. Podemos mencionar, subrayó, los casos del mártir José Olaya, que sufrió el arrancamiento de sus uñas de los pies y manos y de Túpac Amaru II, su esposa e hijos.
También explicó que la humanidad, luego de miles de años de practicar la tortura como método para obtener la confesión, ha llegado a darse cuenta de que ya no puede seguir empleando dichas técnicas que afectan a la persona humana y su dignidad, por lo que han ido apareciendo opositores a estos medios y han surgido así una cadena de protestas contra ellas.
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