Desde agosto tengo a mi cargo el cineclub de la Universidad Jaime Bauste y Meza. Sugerí que se empezara con un ciclo de cine peruano actual y se invitara a los directores, productores y/o actores de cada película. Al plantear el proyecto, no supuse lo gratificante que resultaría.
Todos los sábados a las cuatro de la tarde, se ha establecido un espacio para ver buen cine y conversar. Se trata de dos costumbres cada vez menos comunes: apreciar películas en grupo y charlar. La vida actual nos lleva, muchas veces, a realizar actividades en solitario, para aprovechar mejor el tiempo. De esta manera, se ha vuelto común ver películas en computadoras y hasta en celulares, en los momentos que podemos darnos para hacerlo. Pero, con eso, estamos perdiendo la oportunidad de reflexionar -con la ayuda de otros- sobre la obra que acabamos de disfrutar. Nada más triste que la salida en silencio de los espectadores de una sala de cine o hablando de cualquier tema que no está relacionado con la película. Es como si no hubiera valido la pena haber asistido, como si el filme no hubiera tocado a quien lo vio.
Con el cineclub he redescubierto el placer de la conversación, mientras todos nos miramos a la cara y hablamos de temas tan profundamente humanos como la incapacidad de continuar tras una pérdida en “El elefante desaparecido” de Javier Fuentes-León, como la búsqueda de redención en “Magallanes” de Salvador del Solar y como la reafirmación de la vocación profesional, en largometrajes tan distintos como “Chicama” de Omar Forero y “Como en el cine” de Gonzalo Ladines.
A través del llamado Cine en la Bau, he tenido la oportunidad de conocer mejor el trabajo de talentosas productoras, como Delia García, Cielo Garrido y Carito Denegri; de entender las motivaciones creativas de directores como Dorian Fernández-Moris, Gonzalo Benavente, Luis Enrique Cam, Baltazar Caravedo y Daniel Higashionna. Tampoco han faltado los actores como Sergio Gjurinovic, Tatiana Astengo, Ismael la Rosa, Ramón García, Norka Ramírez, Gonzalo Revoredo, Liliana Trujillo, Irene Eyzaguirre y Oscar Carrillo, entre otros, quienes han compartido – con generosidad – sus conocimientos y experiencias.
Como es de suponerse, el diálogo no se limita a escuchar a los invitados, ya que la participación de los asistentes –con preguntas, opiniones y hasta vivencias que comparten en el momento- es fundamental. Hay que señalar que entre los habitués no están solo miembros de la comunidad universitaria sino también público de fuera, con lo que se enriquece enormemente cada sesión.
El sábado 12 de noviembre, habrá una función muy especial, ya que nos visitarán los miembros de la Selección Peruana de Rugby en silla de ruedas, protagonistas del documental Rodar contra todo. Tendremos la oportunidad de conversar con ellos y con Marianela Vega, la directora de la película. En la universidad nos hemos preparado para recibirlos, mediante la construcción de más rampas y otras facilidades para el acceso de nuestros amigos.
El Cine en la Bau, nuestro espacio para conversar, nos permite una pausa en las agitadas labores de la semana, así como reflexionar sobre cine y sobre humanidad. La entrada es libre y nuestra meta es convocar cada vez a más asistentes. La invitación está hecha https://www.facebook.com/cineenlabau/?ref=aymt_homepage_panel